El estallido de la pandemia de coronavirus ha provocado grandes cambios en todos los ámbitos. Uno de ellos es el mercado inmobiliario, así como las preferencias de los consumidores y los buscadores de vivienda. 

Debido al confinamiento de 2020, las casas amplias y con jardín o terraza se han revalorizado y ahora son muchos los buscadores de casa que no se plantean otra cosa que amplios espacios interiores y exteriores.

Tal y como recoge el portal especializado en vivienda Idealista, algunas de las ventajas de los chalés son estar rodeado de naturaleza, con más aire fresco, que te permita llevar a cabo actividades al aire libre con la familia.

Por eso, este portal recoge una selección de chalés con unos precios que oscilan entre los 40.000 euros y los 200.000 euros, y que están en buen estado o son de obra nueva. Los hay en toda España.

Los expertos recomiendan, antes de comprar, ser conscientes de que los gastos son individuales cuando compramos un chalé: mantenimiento, basuras, etcétera. Por eso, es importante contar con capacidad adquisitiva y ahorros suficientes.

En cualquier caso, "la vivienda continúa siendo un activo muy rentable para invertir. Un activo por el cual podemos seguir obteniendo ganancias, especialmente a través del alquiler", dicen los expertos consultados por Idealista.