La Guardia Urbana de Barcelona ha desalojado en los primeros meses de 2022 a 720 personas de la losa de hormigón de la Ronda de Sant Antoni, que sigue allí tras soportar las carpas del mercado provisional hasta 2018 y que es motivo de quejas vecinales por concentrar de vendedores ambulantes y de droga y a jóvenes que hacen botellón. Los desalojados en lo que va de año ya son casi tres cuartas partes de los de todo 2021 (980).

Ha informado de ello este miércoles el teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento, Albert Batlle, que también ha señalado que el año pasado se interpusieron 922 denuncias por infracciones de convivencia allí, mientras que en lo que va de 2022 se han interpuesto 154.

Batlle ha hecho públicas estas cifras durante la comisión de Presidencia de este miércoles, en respuesta a un ruego de Junts que pedía aumentar las patrullas en las calles colindantes de la ronda.

En el pleno de febrero, se aprobó por unanimidad una proposición de Junts que insta a "licitar e iniciar inmediatamente las obras de retirada de la losa", así como a la reurbanización de la calle. Sin embargo, no es vinculante.