Barcelona recupera el próximo sábado 5 de marzo una atracción histórica de ocio familiar que, a pesar de encontrarse al aire libre, se ha visto afectada por las restricciones impuestas por el coronavirus en estos dos años de pandemia. El Parc d'Atraccions del Tibidabo, que desde hace dos décadas es un parque público más de la ciudad, vuelve a la "normalidad", recuperando toda su oferta de más de 30 atracciones y de espectáculos y con la obligación de usar mascarilla y de gel hidroalcohólico. Abrirá sus puertas de nuevo a partir de su horario habitual las 11 horas del próximo sábado y a las 12 horas ya estará toda su oferta operativa.
La temporada del parque del año 2021 se fue abriendo progresivamente, y tuvo una oferta de atracciones "bastante limitada". No se pudieron abrir las de recintos cerrados como el Hotel Krueger o el Marionetarium. A finales de 2021 ya estaba prácticamente toda la oferta abierta menos el Embruixabruixes (la atracción más antigua del parque, datada del año 1917, y que llevaba dos años cerrada) y el Virtual Exprés (que incorpora unas gafas más potentes que harán más inmersiva la atracción de realidad virtual). Mientras que, de media, el Tibidabo abría 159 días al año, en 2020 lo hizo solo 54 días y en 2021 durante 113 jornadas.
La Cuca de Llum, un espectáculo panorámico
En junio del año pasado se inauguró la Cuca de Llum, el nuevo funicular de acceso al parque de atracciones con un techo transparente que permite ver la ciudad mientras vas subiendo al recinto. Desde entonces han usado este transporte 350.000 personas (su entrada se incluye en la del parque). Las tarifas no han variado este año y se mantienen.
Precisamente, uno de los objetivos del parque junto a alcanzar la cifra de 600.000 visitantes este 2022 (lejos aún de los 700.000 de antes de la pandemia) es reforzar la idea de que subir al Tibidabo es hacerlo a una de las mejores atalayas desde las que disfrutar de vistas panorámicas de Barcelona. Otro de los retos que se ha planteado el parque es el de conseguir que el 60% de los visitantes se trasladen hasta el parque en transporte público (actualmente lo hacen el 42% y en 2020 fueron solo el 26% debido a su cierre).
Celebración del Carnestoltes los dos próximos fines de semana
El próximo 28 de mayo se celebrará una jornada festiva para familias socias y durante los próximos dos fines de semana se celebrará el Carnestoltes, que acabará con una rúa en la que participarán las mascotas del parque, cada una de ellas explicando un cuento. En verano volverá el espectáculo Làser, que vieron el año pasado un total de 90.000 personas.
Por las jornadas solidarias, sociales y culturales que organizó el Tibidabo el año pasado pasaron 45.800 personas y las becas llegaron a 3.900 menores de familias en situación de exclusión social. La idea de la dirección del recinto es que este año se llegue a las 100.000 personas en todas estas actividades.
El regidor del distrito de Sarrià-Sant Gervasi, Albert Batlle, ha explicado este miércoles que el Tibidabo es un "parque pequeño, pero con un carácter muy barcelonés, emblemático y único. En su futuro inmediato queremos potenciar la visita no solo a las atracciones sino al área panorámica", ha dicho. "La visita a la ciudad de Barcelona a través de las vistas del parque es impagable", ha añadido Batlle, recalcando la importancia de esta faceta del Tibidabo como una atracción más a potenciar desde ahora y que suponga un aliciente para el público familiar y los turistas.
Los visitantes puntúan con un 7,2 el parque y con un 8,4 la atención que reciben por parte de los trabajadores, ha destacado este miércoles la directora del Tibidabo, Rosa Ortiz. La plantilla la forman 412 personas, menos que las 631 de 2019, "pero creciendo respecto a 2020", ha detallado.
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