El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha condenado públicamente la “agresión” a Ucrania cometida por Rusia esta madrugada, en la que ha lanzado una ofensiva a gran escala para situarse a las puertas de Kiev, capital del país ucraniano. El jefe del Ejecutivo ha advertido al presidente ruso, Vladimir Putin, de que sus acciones, con las que ha violado “la integridad territorial de terceros países”, no quedarán “impunes” y ha anunciado la aprobación de nuevas sanciones por parte de la Unión Europea, además de recalcar que destinará la ayuda necesaria a los 334 españoles que siguen estando en Ucrania.

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“Los hechos son muy graves y muy simples a la vez", ha empezado Sánchez, que ha explicado a renglón seguido que "una potencia nuclear ha comenzado la invasión de un país vecino al tiempo que ha amenazado con represalias a los países que quieran ayudar", ha dicho refiriéndose al mensaje que el presidente ruso ha lanzado tras el ataque para disuadir a la OTAN de defender a Ucrania. Así, ha asegurado que tanto el Gobierno, como la Unión Europea, a la que ha mentado en una docena de ocasiones, no aceptarán "una agresión injusta, injustificada" que supone una "violación de la legalidad internacional".

Y es que, según su relato, tanto la Unión como España han "apurado la vía diplomática" para alcanzar un acuerdo que "evitara esta escalada". Es por ello por lo que, ante la agresión a Ucrania, ha asegurado que España se enfrenta a dos caminos: "Se abre el camino de la paz y de la legalidad internaiconal o el de la fuerza ilegítima que aboca al desorden mundial". Su decisión, ha dicho, es "dura pero sencilla". Como "una democracia comprometida con los valores de paz", ha remarcado, "elegimos la legalidad internacional", por lo que ha "reclamado" a Putin que "ponga fin de inmediato a las hostilidades y revoque el reconocimiento del Donbás", en referencia al reconocimiento de independencia del territorio autoproclamado ruso con las regiones de Donetsk y Lugansk, que son el centro del conflicto que vive Ucrania desde el año 2014.

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Por ello, y "como pueblo solidario", ha anunciado que intentará "socorrer" a Ucrania con "ayuda financiera, con importantes inversiones para proteger el bienestar de su pueblo y con material sanitario". De todo ello ha informado a Pablo Casado (PP), líder de la oposición, y lo hará al resto de grupos políticos en una comparecencia el próximo miércoles en el Congreso de los Diputados.

Quien compareció ayer en la Cámara Baja fue su ministro de Exteriores, José Manuel Albares, que a escasas horas del ataque ruso, advirtió de que estos días serían "clave" porque podrían suponer "el fin de la paz en Europa". Además, también informó de que al comienzo de la crisis había 435 españoles en Ucrania, de los que todavía quedan 334. Para todos ellos ha tenido recuerdo Sánchez, pues les ha garantizado que el Ejecutivo les "va a atender y a prestar la ayuda necesaria".

Impacto económico del conflicto

El presidente también ha aprovechado su intervención, que ha durado apenas diez minutos, para alertar de que el conflicto desatado en las fronteras orientales de Europa tendrá "un impacto económico en nuestro país", especialmente en el mercado energético. Todo ello, pese a que España es uno de los países que menos depende del gas ruso, a diferencia de, por ejemplo, Alemania. Sin embargo, Sánchez ha declarado que España "lleva tiempo preparando" la posible respuesta al conflicto y ha advertido de que su Ejecutivo tomará "cuantas medidas sean precisas para mitigar dicho impacto sobre los ciudadanos, la industria, las empresas y la recuperación económica", para lo que ha pedido también ayuda a la Unión Europea, de la que ha dicho que tiene "una gran oportunidad de demostrar unidad, solidaridad e integración".