Habrá que ver cómo se comportan cuando vaya su hermano Guillermo y su cuñada, Kate Middleton, pero desde luego el príncipe Harry se ha convertido en un perfecto anfitrión para su familia en California, como demuestran los días que han pasado en Santa Bárbara su prima, la princesa Eugenia de York, con su marido, Jack Brooksbank. Los cuatro, contando con Meghan Markle, fueron a cenar juntos para hablar de los problemas que asolan hoy por hoy a la familia real británica.

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Muy probablemente, la hija del príncipe Andrés, duque de York, querría el apoyo de uno de sus primos más queridos en unos momentos difíciles, con su padre cada vez más denostado por la opinión pública, aceptando un acuerdo con la mujer que le acusa de abusos sexuales para no llegar a juicio, y con el padre de Harry, Carlos de Inglaterra, con la idea en mente de recortar gastos cuando ocupe el trono así como de no dejar que los actos su hermano afecten a su ya de por sí futuro corto reinado.

Además, el propio heredero al trono está en mitad de otra investigación policial, por lo que la cena de las dos parejas tuvo temas de conversación de sobra, máxime si añadimos la salud de la reina, la crianza de los hijos de cada pareja, Frogmore Cottage -antigua residencia de Harry y Meghan cerca del castillo de Windsor donde ahora vive su prima y su marido- o la biografía que está escribiendo el duque de Sussex y que puede interesar a Eugenia por cómo deja a su familia.

Por las fotografías que ha sacado a la luz el canal TMZ, medio por el que se ha conocido el plan que llevaron a cabo el fin de semana, la conversación hubo de ser distendida y muy animada, confirmando la buena relación que existe entre ellos y que cuando están juntos dejan de lado los conflictos abiertos que tienen Harry y Meghan con otros miembros de la realeza de otras generaciones y más afectados por sus comentarios públicos.

A la cena, eso sí, no asistieron ni Archie, de dos años y Lilibet, de ocho meses, los hijos de los duques de Sussex, ni August, nacido hace justo un año, hijo de Eugenia y Jack. Además, Harry y Eugenia asistieron los dos solos a ver la final de la Super Bowl, llevada a cabo en el SoFi Stadium de California.