La guerra entre Ana Obregón y Antonia Dell’ Atte se recrudeció hace unos meses cuando la presentadora defendió a ultranza a Alessandro Lequio de los señalamientos de la italiana. La acusó de mentir y falsificar documentación sensible. Unas palabras que Antonia llevó a los tribunales y que, en uno de los momentos más difíciles de su vida, le ha costado una acusación por un posible delito de calumnias.

Antonia no tiene intención de dar su brazo a torcer. En conversación con este periódico, la que fuera musa de Armani se muestra enfadada y dolida con todos los que, a pesar de los pesares, siguen defendiendo la imagen de Lequio. Antonia está notablemente molesta porque cree que es víctima de un complot urdido en su contra. 

Considera escaso el altavoz que se le ha dado a la victoria judicial contra Alessandro Lequio por los supuestos episodios desagradables que vivió junto a él. Tampoco entiende que haya tan poca gente que quiera escucharla en estos momentos y admite que está decepcionada por el trato que se le dispensa.