El Juzgado de lo Penal número 2 de Madrid, encargado de ejecutorias, ha denegado a la expresidenta de Infancia Libre María Sevilla suspender la orden de ingreso en prisión por la condena a dos años y cuatro meses de cárcel impuesta por hacer desaparecer a su hijo en 2017 y no entregarlo a su padre por orden judicial, han informado fuentes jurídicas.

La solicitud de suspensión de ingreso en el penal se produjo después de que Sevilla solicitara el pasado 31 de diciembre un indulto ante el Ministerio de Justicia firmado por varias asociaciones feministas con la finalidad de librarse de entrar en la cárcel.

Mientras que la solicitud de indulto sigue su trámite, el juez ha rechazado su petición al no arrepentirse de los hechos y entiende que procede su ingreso en prisión, un mandamiento que entregará este martes en mano a la propia condenada.

María Sevilla tiene abierto otro procedimiento penal por presunta falsedad en documento oficial en relación a un informe pediátrico de su hijo, según fuentes jurídicas.

La sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 23 de Madrid y confirmada por la Audiencia Provincial de Madrid la inhabilitó para el ejercicio de la patria potestad durante cuatro años.

"Nos impactó la palidez de los niños"

Los agentes de la Policía Nacional que participaron en marzo de 2019 en su detención relataron en el juicio contra Sevilla el estado en el que se encontraban sus dos hijos, a quienes tenía sin escolarizar ocultos en una finca de Villar de Cañas (Cuenca).

"Había operaciones en las ventanas y versos de la Biblia en las paredes. Nos impactó la palidez de los niños y que la niña -hija con su actual pareja- hacía cosas raras, gestos y sonidos imitando al perro olfateando el aire", narraron.

En la vista, la acusada explicó que en febrero de 2017 abandonó el domicilio al tener la custodia del hijo que tuvo con su exmarido, manifestando que no tenía constancia del auto por el que un juez la obligaba a entregar al pequeño.

Según su versión, no se le notificó la resolución. Además, hizo alusión a varios informes médicos de la Seguridad Social que desaconsejaran que el pequeño estuvieran con su padre.