Una Nochevieja con niveles de actividad similares a los de antes de la pandemia pero sin incidentes graves, se ha saldado con 143 reyertas y agresiones en la Comunidad de Madrid, 44 accidentes de tráfico y 75 por incendios, incidentes que sumaron un 28% más de llamadas a emergencias.

En concreto, y según el balance de Madrid 112, desde las 00:00 hasta las 9:00 horas se han recibido 2.234 llamadas por distintos sucesos, un 28% más que el pasado año, cuando había toque de queda.

De todas las llamadas, 143 fueron por reyertas y agresiones (un 54% más que hace un año), 75 por incendios (un 150% más), 156 por intoxicaciones etílicas (un 438% más), 44 por accidentes de tráfico (un 52% más) y 21 por infracciones de tráfico (un 200% más).

En Madrid capital los servicios de emergencias han tenido niveles de actividad similares a la prepandemia: de 22:00 a 8:00 horas Samur-Protección Civil ha realizado 195 intervenciones, bomberos del Ayuntamiento de Madrid 55 actuaciones (casi todas ellas por quema de contenedores alrededor de la medianoche) y la Policía Municipal atendió unas 1.400 llamadas.

Los agentes municipales intervinieron en 183 ocasiones por ruidos e impusieron sanciones administrativas en 23 locales de ocio.

Un portavoz de Emergencias de la capital ha destacado el hecho de que no fuese necesario realizar ni una sola asistencia sanitaria en Sol y en las calles adyacentes durante las campanadas.

La plaza alcanzó el aforo máximo permitido —7.000 personas— y quedó cerrada a las 23:15 horas; tras las campanadas, la Policía Municipal la desalojó sobre la una de la madrugada para que los servicios de limpieza pudieran trabajar.