La variante ómicron está provocando esta Navidad el aumento de contagios más pronunciado desde que empezó la pandemia, en marzo de 2020. Con una incidencia acumulada nacional en 1.200 casos por 100.000 habitantes, que supera los 2.100 y 2.300 en La Rioja y Navarra y deja a otras comunidades rozando los 2.000, nunca antes se había visto un incremento tan amplio y en tan poco tiempo. Sin embargo, los análisis que existen hasta el momento de lo que ocurre en otros países donde la nueva variante se dejó sentir antes e incluso en el sistema sanitario en España indican que ómicron está cambiando la lógica de la pandemia porque, al menos de momento, un mayor número de casos no se está traduciendo en un aumento de hospitalizaciones e ingresos en UCI. Incluso si la pauta completa de vacuna protege menos frente a ella, sigue siendo efectiva frente a la última versión de la Covid, que es también menos grave, a tenor de lo que se ha visto en otros países, con reducciones de hasta el 80% de enfermos críticos.
Estos datos y conclusiones figuran en el informe que ha difundido este martes la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, que compara lo que ocurre en otros países y, dentro de la Región, los datos de contagios con la atención hospitalaria para concluir que la ómicron es más contagiosa, porque cada persona puede contagiar a entre seis y 10 más -el indicador RO, que no da por estabilizada una pandemia hasta que no está por debajo de 1- pero que, por lo visto en Inglaterra, Escocia y Sudáfrica, el riesgo de experimentar una enfermedad grave es "entre el 15% y el 80% más bajo respecto a la variante Delta".
El viceconsejero madrileño de Sanidad, Antonio Zapatero, lo ha presentado en una rueda de prensa en la que ha pronosticado que la Comunidad de Madrid llegará al pico de la sexta ola "la semana que viene". Frente a las restricciones horarias, de aforos e incluso toques de queda nocturno que han puesto en pie País Vasco, Navarra, Cantabria, Murcia o Cataluña, Madrid se alinea con las comunidades que ha optado por no introducir ninguna, más allá de no autorizar las macrofiestas de Nochevieja y controlar los aforos de la Puerta del Sol durante las campanadas o de las cabalgatas de Reyes.
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El informe constata con datos lo que cualquier ciudadano ve a su alrededor estos días, que los contagios han crecido de manera muy rápida y numerosa. Como conclusiones, afirma que la variante ómicron "es más contagiosa" pero provoca un "menor riesgo de enfermedad grave".
En cuanto a las vacunas, la pauta completa con dos dosis son menos efectivas, un 65%, pero se alcanza una protección del 90% con tercera dosis. Una vez en la hospital con un cuadro grave, añade que "la mayoría de los tratamientos existentes son eficaces" contra la ómicron.
4.000 contagios más
En día del pico de la tercera ola -en enero de este año, después de Navidad- se registraron en a Comunidad de Madrid 7.879 contagios y en la quinta ola -la de este verano, focalizada particularmente en la población más joven- hubo 5.479 positivos en una jornada. El pasado 26 de diciembre, en plena sexta ola, fueron 11.626, un 48% más que en el punto álgido de la tercera ola.
Sin embargo, la presión hospitalaria es menor en términos absolutos y también en términos relativos porque el día en que se contabilizaron 7.879 contagios la tasa de los que ingresó fue del 14% y del 1,5% en UCI. El pasado lunes, las tasas eran del 2% y 0,2% respectivamente.
Según el informe de la Consejería, la tendencia que se observa desde principios de diciembre es las personas que han acudido a las urgencias ha experimentado un mayor crecimiento que las personas que quedaron ingresadas. El 27 de diciembre lo estaban 633 frente a 749 el 1 de este mes y frente a 11.613 de urgencias totales que se atendieron este lunes.
Sudáfrica, en picado
En cuanto a lo que está pasando fuera de España, el informe madrileño indica que la ola por la variante ómicron ha provocado un 60% de hospitalizaciones en Escocia, entre un 50 y un 70% menos en Inglaterra, un 65% menos en Sudáfrica, donde hay una tasa de vacunación menor que en Europa o un 80% en la ciudad de Nueva York.
En Sudáfrica, donde fue detectada la variante ómicron a finales de noviembre, el informe reseña una gráfica que muestra que en los últimos días han empezado a descender los casos prácticamente con la misma intensidad con la que aumentaron en las semanas anteriores. Lo mismo ocurre en Holanda, donde la variante ómicron ha obligado a cerrar establecimientos y a confinar a la población.
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