Esta intervención, a cargo del servicio de Arquitectura y Servicios Centrales Técnicos, pretende paliar el deterioro motivado por la entrada de agua.

El edificio construido en 1930 formaba parte de la antigua estación de Aragón y junto a las otras dos casetas se utilizaba como aduana de mercancías.

Los trabajos, que cuentan con un presupuesto de 48.104,06 euros, IVA incluido, contemplan la limpieza de piezas del tejado, el desmontaje de la cubierta principal y su montaje posterior con teja vidriada, la demolición del falso techo de carrizo en la planta segunda para inspeccionar la estructura portante de la cubierta y la revisión de la estructura de madera en la cubierta (consistente en inspección visual de todas las vigas, tratamiento para xilófagos y humedades o la sustitución de piezas de madera y caracoles deteriorados).

Igualmente, se abordará la restauración de los elementos metálicos existentes, como rejas de ventanas, y del pináculo, así como la limpieza del zócalo de piedra. El plazo de ejecución de todas estas intervenciones es de un mes y medio.

PLAN DE EDIFICIOS CON VALOR PATRIMONIAL

"El gobierno de Joan Ribó está completamente comprometido con la recuperación y mantenimiento de los edificios con valor patrimonial e histórico y por eso venimos dedicando muchísimos recursos personales y económicos a este asunto desde 2015, con una inversión de cerca de cuatro millones de euros en el Plan de Intervención de Edificios con Valor Patrimonial y Social", recalca Notario.

La edil alude en este sentido a proyectos que van desde la rehabilitación integral de la Alquería del Moro, el chalé de Aben Al Abbar o la Casa Natalicia de San Vicente Ferrer, o tareas, estudios e investigaciones arqueológicas previas a proyectos de rehabilitación como el de la Alquería Albors, así como trabajos de consolidación o mantenimiento como los más recientes realizados en la Alquería Gaspar Bono.

La antigua Estación de Aragón fue inaugurada en 1902 como terminal de la línea València- Calatayud ("Vía Churra") en el solar sobre el cual hoy se encuentra el monumento a las víctimas de la riada.

Fue demolida en 1974, liberando los terrenos para la construcción de la actual avenida de Aragón. Del derribo se salvaron varios elementos, como por ejemplo las tres casetas de la Aduana de Mercancías edificadas en 1930 frente a la fachada principal, quedando integradas en la rotonda de la plaça de Saragossa, en la confluencia de las avenidas de Aragó y del Port y l'Albereda.