Según este informe, es la calefacción residencia es la principal consumidora de pellets de madera, con 4900.000 toneladas, mientras que el consumo de la calefacción comercial alcanza los 260.000 euros.

Asimismo, la previsión es que a lo largo de 2022 la producción real de pellets de madera crezca hasta las 790.000 toneladas, lo que supondría un incremento del 426 por ciento desde el año 2010, cuando la producción en España fue de 150.000 toneladas.

Por otro lado, de las 85 plantas que en 2020 existían en España, contaban con el certificado ENPlus 39, de las que seis están en Andalucía y otras tantas en Castilla y León, cinco en Aragón y Comunidad Valenciana; dos en Asturias, Baleares, Cantabria y La Rioja; diez en Castilla-La Mancha; tres en Extremadura y cuatro en Murcia, Navarra y País Vasco.

La producción real de pellets por comunidades en 2020 fue de 48.883 toneladas en las plantas en Andalucía; 68.763 en Aragón; 38.250 en Asturias; 1.150 toneladas en Baleares; 17.967 en Comunidad Valenciana; 281 toneladas en Cantabria; 51.820 en Castilla-La Mancha; 153.467 en Castilla y León; 78.000 en Cataluña; 3.300 toneladas en Extremadura; 62.673 en Galicia; 6.493 en La Rioja; 210 toneladas en MAdrid; 5.137 en Murcia; 36.219 en Navarra y 43.358 en País Vasco.

En Cantabria, Cataluña y La Rioja el cien por cien de su producción real de pellets está certificada por ENPlus, una certificación desde la producción hasta la entrega que evita el fraude a lo largo de toda la cadena de suministro. En Comunidad Valenciana el 99 por ciento de la producción está certificada; en Castilla y León alcanza el 97 por ciento; en Navarra, el 94 por ciento; en Aragón, el 93 por ciento y en Asturias del 92 por ciento.