La construcción de los pantanos de Ortigosa (1932-1962) y Pajares (1987-1995) significó la desaparición de las aldeas de Los Molinos, Pajares y el barrio de abajo de San Andrés, junto con numerosas fábricas de paños y mantas, serrerías, molinos, batanes y algunas de las mejores piezas de cultivo de Ortigosa y Lumbreras.

Pero, más allá de un tremendo quebranto económico para la sierra de Cameros, acelerando su despoblación, también supuso el gran impacto emocional de que muchas familias fueran expulsadas a la fuerza de sus hogares y de sus vidas.

Aún hoy, muchas de ellas sienten muy vivo el dolor causado por el desarraigo de este destierro forzoso. 'La voz de los desterrados' pretende ser un homenaje a todas ellas, convirtiéndolas en las protagonistas de la narración de sus historias.

Álvaro González Martínez, investigador agregado al Instituto de Estudios Riojanos (IER) y escritor ("El Camino del Iregua", 2019), dirige este proyecto: "Estamos intentando contactar con todas las personas que hayan vivido en estas aldeas de Los Molinos, Pajares y el barrio de abajo de San Andrés y que pueden contarnos sus recuerdos de aquellos años, así como con sus descendientes. Algunas familias se quedaron en Cameros pero muchas otras emigraron a otras provincias y a Sudamérica en busca de un futuro mejor. Por eso, hacemos este llamamiento para que cualquiera que tenga relación familiar con estos lugares se ponga en contacto con nosotros. Estamos recogiendo sus testimonios en un libro que publicaremos el año próximo".

'La voz de los desterrados' no será un libro sobre la historia de estas aldeas, "sino que a través de tantos recuerdos personales se está construyendo un relato muy emotivo, común en su esencia a todos los lugares de la España rural que han desaparecido ahogados bajo las aguas de un pantano. Recuerdos de infancia, de la escuela, los amigos, las travesuras, el duro trabajo, las fiestas, las despedidas* de una forma de vida que queremos preservar para siempre antes de que se pierda", detalla Álvaro.

Para ello, se invita a todas aquellas familias que vivieron en estas aldeas de Los Molinos, Pajares y San Andrés a que se pongan en contacto a través de la dirección de email lavozdelosdesterrados@gmail.com o sus perfiles en Facebook e Instagram.

"Las familias que fueron desterradas por los pantanos merecen que su sacrificio para que Logroño y los pueblos valle abajo pudiesen disponer durante todo el año de agua abundante para beber, regar sus cultivos o mover maquinarias industriales sea reconocido y agradecido. Muchas familias perdieron todo lo que habían sido sus vidas a cambio en el mejor de los casos de una compensación económica muy insuficiente".

El próximo año 2022 se cumplirán 90 años desde la colocación de la primera piedra del pantano de Ortigosa por el propio Niceto Alcalá Zamora, presidente de la II República, y 60 desde su finalización. En 2020, al cumplirse 30 años de la despedida oficial de Pajares -18 de marzo de 1990-, ya organizaron un evento conmemorativo junto a la orilla del pantano que a causa de la pandemia se tuvo que suspender. "Unas cien personas habían confirmado su asistencia, pero justo coincidió con el primer confinamiento de marzo de 2020. El próximo año trataremos de compensarlo con otros eventos que ya estamos planificando", promete.