Los hechos ocurrieron el pasado 23 de noviembre, cuando una dotación de la Brigada Nocturna de la Policía Local asistió al área de servicio de la A-70, en sentido Alicante, para atender una llamada en la que se alertaba de una pelea entre dos varones.

Los agentes se entrevistaron con uno de los implicados que, según manifestó, había estado de cumpleaños con su hermano cuando en el trayecto de vuelta tuvieron una discusión por un asunto familiar y, al parar en la gasolinera a repostar, habían subido el tono de la disputa, por lo que el hermano se había marchado andando por la autovía.

Así, los agentes fueron en busca del otro implicado, que se encontraba a unos 300 metros del área de servicio, por lo que le localizaron caminando por la autovía sin ningún elemento reflectante por lo que los agentes le indicaron que se detuviera.

De forma "sorprendente", el detenido propinó una fuerte patada en el pecho a uno de los agentes y un puñetazo en la cabeza a otro mientras le pedían que se tranquilizara.

La dotación policial tuvo que pedir apoyo a más unidades debido al "elevado nivel de agresividad" del detenido y al peligro que tenía la escasa iluminación del lugar. Ambos agentes fueron trasladados al hospital con diversas lesiones en la cabeza, pecho, rodillas y manos.