En la construcción colectiva de una ciudad para las personas, se han de considerar, entre otras cosas, las implicaciones ambientales que supone el vivir junto con otras personas y seres vivos, explican desde la organización.

En las ciudades habita la mayoría de la población mundial y la actividad de su día a día agrava problemas ambientales como el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. De ahí la necesidad de transformarlas para luchar contra estos problemas y, a la vez, mejorar la calidad de vida de quienes las habitamos.

En este paseo, trataremos de conocer un poco mejor la parte verde de nuestro barrio, para que no sea solo un atrezo que vemos de reojo cuando caminamos por las calles o miramos desde la ventana. Para ello proponemos un recorrido a través del parque del Ebro y las calles de San José y Madre de Dios, en el que conoceremos diversos árboles que encontramos en nuestro día a día.

"En esta actividad vamos a caminar con calma, observando algunos árboles que llevan años esperando para decirnos muchas cosas. Os invitamos a participar y a escuchar lo que nos quieren transmitir", indican.

"El paseo nos ayudará a saber dónde es verde nuestro barrio, y a reflexionar sobre las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), según la cual las ciudades deberían contar con 50 m2 de zonas verdes por habitante, adecuadamente distribuidas en el espacio y fácilmente accesibles para todas las personas".

Por su parte, Greenpeace plantea que se haga realidad la regla 3-30-300 que propone que veamos al menos 3 árboles desde nuestra ventana, que nuestro barrio tenga un 30% de superficies verdes y que dispongamos de un buen parque a menos de 300 metros.

La actividad está vinculada a la exposición itinerante 'Caminando el barrio', que se trasladará este fin de semana desde la Biblioteca Rafael Azcona a la sede de la Asociación Vecinal San José. Desde la Comisión Ciudadana de Espacios Públicos de San José y Madre de Dios "queremos que este paseo sirva, junto con la propia exposición, como invitación a la reflexión para un desarrollo urbano más amable, justo y sostenible, así como para fortalecer la cohesión vecinal y estimular la participación en la identificación de necesidades y en la propuesta de soluciones", finalizan.