La nueva Ley de Seguridad Ciudadana con la que el PSOE y Unidas Podemos pretenden sustituir a la llamada 'ley mordaza' nacerá bajo la amenaza de durar poco en el Boletín Oficial del Estado (BOE). El líder de la oposición y presidente del Partido Popular, Pablo Casado, aseguró este miércoles que entre sus intenciones está la de "llegar hasta el final" para cambiar la norma, muy discutida por los sindicatos policiales. También Vox pretende derogar la nueva norma, contra la que se manifestaron de igual forma miembros de Ciudadanos. El PSOE, por su parte, destacó que la nueva norma garantizará derechos, no los recortará.

"No vamos a tolerar este atropello a la protección de quienes nos protegen, sin seguridad no hay libertad", señaló Casado en una concentración a la que acudió este miércoles con sindicatos policiales y guardias civiles y que sirvió como antesala de la manifestación con la que Jupol prevé abarrotar las calles madrileñas el próximo sábado. "Esperamos a más de 100.000 personas", aseguraron desde el sindicato mayoritario de la Policía Nacional.

El líder del PP, que fue acompañado por la portavoz parlamentaria popular, Cuca Gamarra, añadió que el texto, que rebaja ciertas aristas de la 'ley mordaza', aprobada por el PP en solitario en 2015, deja a los agentes "vendidos" y "solo beneficia a los socios" parlamentarios del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Además, aseguró que la llevaría ante el Tribunal Constitucional si se "perpetra" la nueva norma. "Si no hay resolución antes de que acabe la legislatura, vamos a retrotraer esta reforma cuando ganemos las elecciones", enfatizó ante los periodistas.

Los policías salen a la calle en su primera gran movilización contra la nueva 'ley mordaza': "Nos deja vendidos"

En la manifestación, convocada por la plataforma 'No a la España insegura' y que concentró a unas 200 personas frente a la sede de la Delegación del Gobierno en Madrid, Casado coincidió con Santiago Abascal, líder de Vox, y otros miembros de Ciudadanos: Edmundo Bal, portavoz en el Congreso, y Begoña Villacís, líder de Cs Madrid y vicealcaldesa de la capital. En declaraciones a los medios de comunicación, Abascal también aseguró que llegará "hasta el final" para cambiar la norma, cuya reforma se encuentra en tramitación en el Congreso de los Diputados tras acordar socialistas y morados las enmiendas.

Junto al secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, y la diputada Macarena Olona, Abascal declaró que su formación hará "todo lo que sea necesario" para frenar la reforma. "Vamos a estudiar la legalidad constitucional y vamos a ir hasta el final", prometió. Según su opinión, la futura ley busca "preparar el terreno" para cuando el PSOE pierda las elecciones. "Esta es una ley para desarmar a la policía, para dejar a las fuerzas y cuerpos de seguridad en la inseguridad jurídica absoluta", alertó el líder de Vox.

Es una reforma "sin consenso ni diálogo", señaló por su parte Bal, que aseguró en que el nuevo articulado manda un mensaje a la ciudadanía de que "la policía no les va a proteger", una crítica compartida por algunos sindicatos policiales. Los representantes de los agentes leyeron también un manifiesto en el que mostraron su rechazo con algunas de las enmiendas pactadas, como la rebaja de multas por tenencia de drogas en la calle o la desprotección que supondrá para los agentes cuestionar la veracidad de sus testimonios o celebrar manifestaciones sin previo aviso.

Con todo, está previsto que los líderes de las tres formaciones conservadoras vuelvan a coincidir en una protesta similar dentro de tres días. El sábado se celebrará una marcha convocada por Jupol, a la que casi todos ellos confirmaron su asistencia. 

El PSOE dice que se garantizarán derechos

Por su parte, desde el PSOE defendieron que la nueva ley garantizará derechos y libertades a los ciudadanos, "no los recortará". El portavoz de la formación, Felipe Sicilia, trasladó en una rueda de prensa en Ferraz su "absoluto respeto" por las manifestaciones sucedidas pero hizo hincapié en que la ley pretende proteger derechos fundamentales, como el de reunión, algo que, según él, no hacía la 'Ley Mordaza'.

"Lo que pretendemos es mejorar el contenido de la misma, para que se pueda llevar de una manera mucho más clara en el ámbito jurídico y suscite menos dudas el derecho de manifestación, porque ahora mismo el marco jurídico que lo ampara deja dudas de cómo llevarlo a efecto", añadió Sicilia, que calificó de "falsas" las acusaciones del PP y de Vox.