La firma aragonesa Pastelería Tolosana sigue ampliando su presencia en el territorio nacional con su postre más icónico: la Trenza de Almudévar. En lo que va de año está ya presente en establecimientos gourmet de 15 nuevas provincias y espera que a lo largo de 2022, la Trenza de Almudévar pueda adquirirse en “todas las capitales de provincia y en las principales ciudades  turísticas españolas”, como afirma Jesús Tolosana, gerente de la firma pastelera.

Un estudio reciente de la consultora Sendcloud pone de relieve que los consumidores españoles compran cada vez más en los comercios de cercanía. El estudio, en concreto, señala que el 63% de los españoles ha comprado más en tiendas locales desde que empezó la pandemia, frente al 50% de la media europea. Dehecho, casi cuatro de cada diez españoles afirman que prefieren comprar en tiendas locales frente a grandes  Marketplaces. Una idea “coincidente con lo que Pastelería Tolosana viene Desarrollando desde hace décadas: la experiencia en tienda de postres como nuestra Trenza ayuda a impulsar el crecimiento de las tiendas de proximidad”, destaca el gerente de la firma pastelera aragonesa, quien está viendo como desde junio de este año cada vez son más los establecimientos Gourmet de grandes ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla o Málaga que se están interesando por la Trenza. “Al reducirlas restricciones, el comercio de proximidad se ha reactivado y estamos apreciando una mayor demanda de nuevos establecimientos”, concluye Tolosana.

Pastelería de autor: un postre con arte

Pero, ¿qué tiene la Trenza de Almudévar que en los últimos meses algunos de los críticos gastronómicos más mediáticos hablan de su singularidad? El famoso postre hojaldrado de Pastelería Tolosana no solo está cautivando a la prensa especializada sino que es la inspiración de los múltiples intentos de imitación de algunas grandes cadenas de alimentación del país.

Coincidiendo con el 40º aniversario de la creación de su icónico postre, el gerente de la firma altoaragonesa Jesús Tolosana tiene la respuesta: “La constancia en la elaboración, el respeto total a una receta única y la calidad rinde sus frutos, por eso la Trenza está cautivando por su exquisitez a los que quieren saborear un producto único que, además, solo se comercializa en establecimientos gourmet”.

Y es que la Trenza de Almudévar es un postre natural, sin ningún tipo de aditivos, elaborado a partir de una delicada masa madre, que es la base para una larga fermentación. La Trenza se cuece a diario, y se vende siempre fresca y tierna. Tolosana cree que ser objeto de copias en bastantes cadenas de supermercados en España no deja de ser “una muestra de que la Trenza tiene una calidad que todos desean, aunque, además del sabor genuino, el exclusivo postre de

Almudévar también sea atractivo por su refinado envase y presentación”, destaca el gerente de la firma pastelera.

Pastelería Tolosana tiene claro que para lograr un postre de éxito, hay que crear un postre de calidad con un proceso de elaboración minucioso y unos “buenos ingredientes”, como afirma Jesús Tolosana.

La Trenza de Almudévar es ya un postre reconocido no solo por su sabor y presentación sino por una serie de atributos que han hecho de la firma altoaragonesa una empresa familiar que busca la excelencia en todos sus productos, especialmente en la Trenza, buscando un valor añadido mediante acciones con reconocidos chefs y sumilleres, que combinan alimentos de

forma equilibrada y saludable con la Trenza o que buscan su maridaje perfecto de con algunos de los mejores vinos y licores.

Esta búsqueda constante de diferenciación y calidad de todo lo que rodea a la Trenza de Almudévar se complementa con acciones novedosas e innovadoras como el Certamen de Ilustración Dulce o el Concurso Nacional “Me entusiasma la Trenza” que reconocen la labor de jóvenes pasteleros de prestigiosas escuelas europeas y que han celebrado ya la octava y la quinta edición respectivamente.

“Queremos que encuentren la auténtica Trenza de Almudévar en lugares “auténticos”, concluye Jesús Tolosana.

Así es la trenza

La Trenza de Almudévar recoge la tradición de cuatro generaciones de pasteleros que a principios de los años ochenta adaptaron al gusto español una receta del centro de Europa para hacerla más crujiente y cremosa sin ningún tipo de aditivo, con una fermentación muy larga, rellena de productos nacionales como las pasas, las almendras o las nueces.