OFRECIDO POR HIDRAQUA
El parque La Marjal, junto a la playa de San Juan de Alicante, se han visto beneficiados de la buena gestión del agua.
El parque La Marjal, junto a la playa de San Juan de Alicante, se han visto beneficiados de la buena gestión del agua.
HIDRAQUA

Menos contaminación y gran ahorro de agua depurada gracias a Hidraqua

  • Con ocasión del Día Mundial del Saneamiento, la ONU pretende concienciar a la sociedad sobre la importancia de la salubridad del agua.

La introducción de los sistemas de saneamiento modernos ha contribuido enormemente tanto a reducir la transmisión de enfermedades como a favorecer la salubridad de los espacios, facilitando de esta forma la expansión de los núcleos poblacionales. Sin embargo, la crisis climática está incidiendo hoy muy negativamente en la disponibilidad de un recurso tan escaso como es el agua, afectando igualmente a elementos claves de los sistemas de saneamiento como las tuberías, los tanques y las plantas de tratamiento.

Por esta razón Naciones Unidas (ONU) ha introducido entre sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para el año 2030 la necesidad de conseguir "agua y saneamiento para todos" (objetivo sexto). También ha tomado la iniciativa para intentar concienciar a la población sobre la necesidad de conseguir unos sistemas de saneamiento adecuados, nombrando al 19 de noviembre como el Día Mundial del Saneamiento.

Es en este complicado contexto en el que cabe destacar los esfuerzos que Hidraqua está llevando a cabo en la Comunitat Valenciana con el fin de impulsar un saneamiento responsable y más sostenible. Los datos son concluyentes: si en España se reutiliza menos del 10% del agua tratada, en cambio, en los municipios de dicha Comunidad en los que Hidraqua y sus empresas prestan servicio el porcentaje de reutilización asciende al 53,50%. Se trabaja en la regeneración de este bien escaso depurado, con la finalidad de que pueda volver a ser utilizado para diversos usos como los de producción agrícola o industrial.

Agua para limpiar y regar

Otro de los usos preferentes de esta agua regenerada es en la actualidad el riego de calles y zonas verdes. Por ejemplo, el 83% de las zonas verdes de Alicante se riegan de esta manera, gracias a las estaciones depuradoras de Rincón de León y Monte Orgegia, a través de la Doble Red Urbana de Reutilización (DRUR) de agua regenerada (que tiene una longitud de más de 43 kilómetros). El mismo uso se está dando a las aguas depuradas en los municipios de San Fulgencio, Rojales y Guardamar del Segura. También en Benijófar, donde Hidraqua y el Ayuntamiento del lugar pusieron en marcha el Parque Cañada Marsá, con una red de riego para las zonas verdes que ha mejorado ostensiblemente, para el disfrute de la población, la cubierta vegetal de dicho parque.

Cañada Marsá, en Benijófar.
Cañada Marsá, en Benijófar.
HIDRAQUA

Hidraqua incluso está trabajando, junto con los municipios afectados, en intentar conceder un valor añadido a estas aguas regeneradas. Por ejemplo, a través del Proyecto Guardián que, financiado por la Unión Europea, busca aumentar la resiliencia a incendios forestales en el Parque Natural del Turia, con la colaboración de los ayuntamientos de Paterna y de Riba-roja del Turia, de CETAQUA, de la Universitat de Valencia y de la Universitat Politécnica de Valencia.

Otros ejemplos se pueden encontrar en el Clot de Galvany, en donde la Estación depuradora de Arenales del Sol, sita en la ciudad de Elche, lleva a cabo un tratamiento terciario de las aguas, con el objeto de nutrir este espacio natural municipal. De este modo, se favorece tanto la gestión sostenible del paraje como el bienestar de las diversas especies que en él habitan. O también es muy característico el parque inundable de La Marjal en la Playa de San Juan, situado en la ciudad de Alicante. Allí existe una laguna artificial permanente, cuya existencia se debe a los diversos aportes de agua de la estación depuradora, creando una especie de ecosistema que sin duda favorece la biodiversidad.

Se favorece la gestión sostenible del paraje y el bienestar de las especies

Otros usos ambientales se están llevando a cabo en la actualidad con grandes resultados. Hidraqua comenzó en agosto de 2019 a gestionar el sistema terciario de la depuradora de Sueca. Unos meses más tarde, en abril de 2020, pasó a gestionar también el sistema terciario de la depuradora de Albufera. En ambos casos, el destino de estas aguas que han sido regeneradas es el Tancat de Milia y el Tancat de I’lla, ambos propiedad de Acuamed. Dichos aportes hídricos, que proporcionan agua de gran calidad, están teniendo un evidente impacto positivo sobre la diversidad del ecosistema que se disfruta en la Albufera valenciana.

Por otro lado, la empresa mixta Aigües de Paterna ha conseguido, con su Plan de control de residuos, que en Paterna se reduzca el índice contaminante de las aguas residuales de 9,56 (año 2020) a 0,99 en la actualidad, lo que supone la disminución de los contaminantes vertidos a la red en casi un 90%. También el Ayuntamiento de Aspe, junto con Hidraqua, comenzó el año pasado su propio Plan de control de vertidos, con el fin de favorecer la reutilización del agua depurada y disminuir el impacto negativo sobre el medio ambiente.

Responsabilidad ciudadana

Cada año, toneladas de residuos acaban en las redes de alcantarillado y en las depuradoras. Parte de estos residuos (como toallitas, bastoncillos, etc.) que tiran los ciudadanos por el inodoro no son biodegradables y generan obstrucciones en estas instalaciones.

Asimismo, a esta problemática se ha unido la presencia de mascarillas y guantes debido al aumento de su uso a causa de la crisis sanitaria. Solo en el último año, en las depuradoras gestionadas por Hidraqua y sus empresas participadas se recogió la cantidad equivalente a 134 camiones de basura al año, contando que cada camión puede cargar alrededor de 18 toneladas.

Además, en el caso de las toallitas, de bebés o desmaquillantes, los problemas generados implican la presencia de madejas y madejas de fibras textiles, que atascan los filtros de la maquinaria por la que pasa de forma continua el agua de los alcantarillados de la ciudad; generando lo que a nivel social ya se ha denominado como ‘el Monstruo de las Cloacas’. Y es que la composición de estas toallitas es de fibras textiles, mezcladas en muchas ocasiones con plásticos. Y aunque muchos de estos envases marcan que se trata de productos biodegradables, realmente no son fácilmente desintegrables, puesto que el tiempo que tardan en degradarse es considerablemente elevado. La responsabilidad ciudadana es clave para mejorar en este aspecto.

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