La tensión entre Polonia y Bielorrusia aumenta por momentos. Tanto es así que, después de que 50 migrantes rompieran las verjas, el gobierno polaco ha tomado la decisión de solicitar ayuda a la OTAN, según informa The Guardian.
Estos hechos sucedieron sobre las 17.00 horas de este sábado y han sido confirmados por parte de la policía de Polonia este domingo. Los agentes ya han detenido a 22 personas de origen iraquí de las 50 que entraron.
En tan solo un día, se han registrado 223 intentos de entrar por la frontera que separa ambos países, como han confirmado también los agentes polacos que se encuentran en el terreno.
Letonia y Lituania se encuentran debatiendo con Polonia para solicitar "medidas concretas" en una convocatoria del Consejo de la OTAN para así poder intentar solucionar la crisis migratoria que se está produciendo desde este lunes.
Cualquier miembro de la OTAN puede pedir una reunión cuando consideren que su seguridad, integridad territorial o independencia política está siendo amenazada, como así recoge el artículo 4 del tratado de la Alianza.
Desde el gobierno bielorruso se asegura que, de manera aproximada, unos 2.000 migrantes han sido enviados a sus países de origen, a África y Oriente Medio fundamentalmente.
Cham Wings, la aerolínea siria, tomó la decisión de suspender todos los vuelos dirigidos hacia Minsk a causa de la crisis migratoria en la que se encuentran en estos momentos, como así anunciaron en Twitter.
Tanto Polonia como Letonia y Lituania llevan meses evidenciando que se estaban produciendo entradas ilegales de manera masiva provenientes desde Bielorrusia, acusando así al gobierno de Lukashenko de organizar una crisis que desestabilice a la Unión Europea. De esta manera, respondía contundentemente tanto a las sanciones emitidas contra este país como a las manifestaciones de apoyo a los disidentes bielorrusos por parte de estos países.
Andrzej Duda, presidente de Polonia, ha asegurado a los medios de comunicación que la UE se plantearía nuevas sanciones contra Bielorrusia, que podrían implicar el cierre por completo de la frontera.
La respuesta de Polonia ante esta crisis ha sido el despliegue de unos 15.000 soldados en la frontera compartida con Bielorrusia para así frenar la avalancha de migrantes. Este sábado, un accidente en esta zona por un disparo fortuito de su arma según señalan las primeras informaciones provocó el fallecimiento de un soldado polaco.
Vladimir Putin, el líder ruso, se ha mostrado dispuesto a ayudar en todo lo que sea posible para que se llegue a una solución. Asegura que él no tiene nada que ver en lo ocurrido respondiendo así a las acusaciones de Liz Truss, secretaria de Exteriores de Reino Unido, que lo calificó como "una crisis vergonzosa de migrantes creada artificialmente".
"Ya he dicho que no tenemos absolutamente nada que ver. Simplemente desean hacer pagar a justos por pecadores", aseguró el presidente de Rusia, señalando que se había enterado por los medios de comunicación de esta crisis.
Borrell pide a Bielorrusia proteger a los migrantes en frontera europea
El alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, señaló este domingo la importancia de proteger a las personas que se encuentran en la frontera entre Bielorrusia y la UE, en una llamada con el ministro de Exteriores de ese país, Vladímir Makei.
"Hablé con el ministro de Exteriores de Bielorrusia, Makei, para abordar la precaria situación humanitaria en la frontera con la UE. Las vidas de las personas deben ser protegidas y se debe conceder acceso a las agencias humanitarias". indicó Borrell a través de su perfil en la red social Twitter. Para Borrell, "la actual situación es inaceptable y debe detenerse. La gente no debería ser utilizada como arma", subrayó.
Spoke to #Belarus Foreign Minister Makei to raise the precarious humanitarian situation at the border with the EU. Peoples lives must be protected and humanitarian agencies allowed access.
— Josep Borrell Fontelles (@JosepBorrellF) November 14, 2021
The current situation is unacceptable and must stop. People should not be used as weapons.
Por su parte, Makei aseguró en un comunicado haber manifestado a Borrell que las sanciones impuestas a su país son contraproducentes y confirmó su disposición a un diálogo "respetuoso, en pie de igualdad, con la Unión Europea".
La conversación telefónica entre el ministro bielorruso y Borrell se produjo en vísperas de la reunión que celebrarán este lunes, en Bruselas los titulares de Exteriores de los Veintisiete, en la que se prevé aprobar un nuevo marco legal que permitirá imponer sanciones adicionales a Bielorrusia por la crisis en la frontera.
La UE acusa al régimen de Alexandr Lukashenko, de organizar traslados de migrantes desde países de Oriente Medio hasta la frontera que Bielorrusia tiene con Polonia o Lituania, donde permanecen miles de estas personas. Ha considerado esta situación un "ataque híbrido" lanzado por Minsk y no una crisis migratoria al uso.
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