Las víctimas son Josep Sans Cabot y Anton Casanovas Castany, ambos miembros del ejército republicano que murieron en el frente del Ebro, y son las últimas dos personas identificadas este verano junto con los cuerpos ya entregados el pasado 5 de noviembre, ha informado la Conselleria de Justicia en un comunicado.

Ciuró ha defendido que con la entrega de los cuerpos se cierra el círculo que empezó con la exhumación de los retos y que permite a las familias "cerrar el duelo".

Ha pedido a las familias que tengan a familiares desaparecidos durante la Guerra Civil que "no desfallezcan", que se adhieran al programa de identificación genética que ya cuenta con más de 2.600 muestras de familiares.

Ha explicado que en Catalunya hay 700 fosas comunes de las que solamente se han abierto 60 porque hacerlo implica "un esfuerzo muy, muy grande", pero ha afirmado que la Conselleria incrementará el presupuesto para continuar haciéndolo los próximos meses.