Así lo indica la Encuesta Social de Cantabria de 2020, basada en las encuestas realizadas entre junio y octubre de ese año, tras la salida del confinamiento, a casi 1.800 personas.

Los principales datos de la misma han sido presentados este martes en rueda de prensa por la consejera de Economía y Hacienda, María Sánchez (PSOE), y Héctor Sánchez, director del Instituto Cántabro de Estadística (ICANE), que es el organismo del que depende esta encuesta oficial que hace una "radiografía" de los hogares de la comunidad.

La encuesta, que se realiza cada dos años y cuya publicación más reciente se ha retrasado por la crisis sanitaria, muestra una "mejoría global" de la renta disponible de los hogares cántabros que en 2017 y un incremento en el último año, gracias al confinamiento, de su capacidad de ahorro, creciendo en 5 puntos porcentuales, lo que ha permitdio que un 6% más puedan hacer frente a gastos imprevistos (59,8%) así como a costearse una semana de vacaciones (63,5%).

Los ingresos medios mensuales de los hogares cántabros rondan los 2.200 euros mientras que en 2017 eran de 2.000. En aquellos encabezados por hombres es superior (2.300 euros) al de aquellos liderados por mujeres (2.000).

La mayoría de los ingresos proviene del trabajO- un 78% frente al 71% de 2017- y de las prestaciones contributivas (un 27%, dato inferior al 37% de 2017).

La encuesta indica que casi un 47 por ciento de las mujeres trabajadoras tienen salarios inferiores a 1.500 euros, algo que solo le ocurre al 31% de los hombres.

En cuanto a la capacidad de llegar a fin de mes, el número de hogares con dificultades ha bajado un 11%, destacando que aquellos que presentaban grandes obstáculos en 2017 han descendido un 2% en 2020. Según la encuesta, el porcentaje de los hogares que llegan "con facilidad" a fin de mes, se ha incrementado en casi un 7%.

Estos datos, sin embargo, se interpretan "con cautela" por parte del Gobierno ante el aumento de los que no saben, que creció en casi 4 puntos, hasta el 5,2%, frente al 1,3% que había tres años antes.

Asimismo, la encuesta revela que, con un 45,6% de respuestas recogidas, los entrevistados creen que su situación económica se mantendrá más o menos igual con el paso del tiempo.

Sin embargo, la cifra de indecisos se disparó hasta casi el 20%", según ha reconocido Sánchez, quien considera que todas las opiniones recogidas en esta muestra están condicionadas por "la incertidumbre laboral que planeaba sobre muchos trabajadores y trabajadoras a mediados del año 2020".

MÁS PESIMISMO SOBRE EL FUTURO DE CANTABRIA

En relación con las perspectivas sobre el futuro de la comunidad autónoma, la encuesta revela que los cántabros eran en 2020 más pesimistas que tres años antes.

Así, mientras que en 2017, la mayoría creían que en horizonte de cinco años la situación sería parecida a la que había entonces, esa visión es "mucho más pesimista" en 2020.

Para la consejera, esta apreciación sobre las perspectivas de la comunidad se debe al momento en el que se recabó el dato (en el tercer trimestre de 2020). "Cuando el ICANE salió a preguntar cómo creían que se iba a encontrar Cantabria dentro de cinco años, acabábamos de salir de un confinamiento duro, la vacuna todavía era un deseo, los ERTEs estaban en rodaje y la Unión Europea no había decidio el grado de actuación que se iba a implementar", ha dicho.

Sánchez considera que hoy, un año después, los cántabros, aunque aún deben adoptar medidas sanitarias frente al Covid, disfrutan de una vida "prácticamente normal" y "todos los indicadores de la economía auguran un crecimiento notable para 2022".

"Estoy segura de que la respuesta a esta pandemia mundial ayudará a que esta última cuestión tenga una gráfica en forma de V y hará que los cántabros y las cántabras recuperen el optimismo de años anteriores cuando volvamos a preguntarles en 2022", ha opinado la consejera, que ha apuntado que el Gobierno de Cantabria está trabajando en ello e "intentando crear confianza y certidumbre".

SATISFACCIÓN CON LOS SERVICIOS PÚBLICOS

Además de la capacidad económica de los cántabros y de sus perspectivas, la encuesta muestra tambinén la satisfacción de éstos con respecto a los servicios públicos.

Así, en ella, se destaca que, pese al impacto de la pandemia, la ciudadanía ha aumentado su satisfacción en líneas generales sobre el sistema sanitario.

La consejera ha destacado que, pese a la "coyuntura sanitaria y de todas las dificultades", la valoración se ha mantenido "en valores muypróximos a los registrados en 2017".

En todos los casos, tanto en el ámbito público como en elprivado, los servicios sanitarios cuentan "con la aprobación mayoritaria de la ciudadanía", destacando especialmente el aumento de la satisfacción entre los que acudieron a un hospital público (un 8,5 de cada 10 encuestados) y los servicios de urgencias (un 8,1).

No obstante, la opinión ha empeorado "ligeramente" tanto en el caso de los usuarios de centros de salud y especialistas públicos, como en relación al hospital y las consultas de especialistas privados.

Por su parte, el director del ICANE, Héctor Sánchez, ha explicado la metodología de esta encuesta, compuesta por preguntas relacionadas con las características del hogar y del número y perfil demográfico y socioeconómico de sus miembros.

Hay un cuestionario destinado "únicamente al informante" en el que se obtiene, además de la información económica individualizada, opiniones sobre diferentes cuestiones.

En sus casi 200 páginas, la Encuesta Social de Cantabria 2020 del ICANE muestra que dos terceras partes de los hogares cántabros cuentan con un hombre como sustentador principal mientras que, en el caso de las familias con hijos y un solo sustentador, los hogares monomarentales cuadruplican a los monoparentales. "El cuidado de loshijos en las familias con una sola persona al frente sigue siendo cosa de mujeres", ha advertido Sánchez.

OTRAS CUESTIONES

La encuesta, por ejemplo, pregunta sobre temas sociales diversos, entre ellos por la inmigración.

Así, según la encuesta, el 73% está de acuerdo en que los inmigrantes tengan los mismos derechos que todo el mundo, aunque sí hay una disminución del 2% respecto a 2017. Además, un 54% considera que éstos no quitan trabajo y un 57% mantiene que su llegada es buena para la economía.

En la encuesta, hay un capítulo que mide la confianza de los cántabros en las instituciones y el segundo sobre diferentes aspectos de la marcha de la región.

Según el resumen ejecutivo de la encuesta, la desconfianza de los ciudadanos en sus instituciones ha caído entre 2017 y 2020.

Ha caído la confianza ligeramente en el sistema legal, bajando al 42%, los políticos (8,1%) y la policía (67%) pero sigue aumentando, aunque en menor medida, en los distintos gobiernos, tanto municipal, autonómico y estatal. A pesar de ello, el gran aumento se ha producido entre aquellos que no saben, que ha crecido en 6 puntos porcentuales.

En la Encuesta Social de 2020 se incorpora un módulo sobre ahorro energético y medio ambiente, comparable en su mayoría al que se planteó en la de 2011.

Dentro de este apartado, se observan cambios significativos en las razones alegadas para no separar los residuos. La más frecuente pasa a ser la falta de espacio en la vivienda y disminuye la que tiene que ver ccon la no cercanía de servicios de recogida de dichos residuos.

También cae la que tiene que ver con una falta de interés o el esfuerzo que ello supone, que cae hasta el 5%.