El Banco de España recomienda mantener una política monetaria y fiscal "expansiva" a medida que se consolida la recuperación, pero recuerda que, aunque el rebote económico se mantendrá al menos en el corto plazo, el país tendrá que afrontar "un proceso de saneamiento de las finanzas públicas, que las sitúe, en el medio plazo, en una posición más favorable". Así se expresa el supervisor bancario en su último Informe de Estabilidad Financiera, hecho público en la mañana de este jueves.

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Para evitar que la deuda se estanque en torno al 115% del PIB en los próximos 15 años (el escenario que la institución planteó en sus últimas proyecciones macroeconómicas si no se toman medidas), el Banco de España ve necesario eliminar "el componente estructural del desequilibrio de las cuentas públicas". Es decir, el déficit presupuestario estructural que la economía española arrastra desde antes de la llegada del coronavirus. "El elevado nivel de deuda alcanzado hace a la economía española vulnerable ante el posible deterioro de las condiciones de financiación y reduce la capacidad de respuesta ante la materialización de riesgos", explican los autores del informe.

A lo largo del documento, la institución señala que la situación macrofinanciera de la economía española "ha mejorado" respecto a la publicación del anterior informe en la primavera de este año, pero advierte una vez más de que "las vulnerabilidades y riesgos permanecen todavía en niveles elevados".

Además del deterioro de las cuentas públicas, el Banco de España apunta a la débil situación financiera de ciertos hogares y empresas y la escasa rentabilidad de los intermediarios financieros como los principales riesgos para el país. Respecto a lo primero, el supervisor bancario explica que, aunque la mayoría de los sectores de actividad empresarial ya han recuperado su nivel de facturación previo a la crisis, "la recuperación es todavía incompleta en los sectores más afectados" por la pandemia. Entre ellos destaca la hostelería, el transporte o la industria automovilística. El documento señala que "parecen haberse evitado escenarios de aumentos significativos de las quiebras empresariales", no obstante, recuerda que los apoyos de las medidas extraordinarias sobre estos sectores "todavía son muy importantes".

"Una característica [de esta crisis] es que la morosidad no ha aumentado. En otras crisis los créditos dudosos aumentaban significativamente. Creemos que esto tiene que ver con todas las medias para mitigar el precio de la crisis", ha expresado Ángel Estrada, director general de Estabilidad Financiera del Banco de España en un encuentro con periodistas. No obstante, señala que en los sectores más afectados comienza a verse "un aumento en la tasa de créditos dudosos y préstamos de vigilancia especial [aquellos casos en los que el prestatario cumple, pero donde los bancos ven señales de riesgo]. 

El Banco de España anticipa "una revisión significativa a la baja" del crecimiento económico para este año

En lo tocante a la situación del sistema bancario, el informe subraya que, pese a los buenos resultados de la banca en el primer semestre del año, la crisis causada por la Covid ha puesto de manifiesto el problema de rentabilidad que afronta el sector en un entorno de tipos de interés bajos -cuando los tipos de interés son bajos la rentabilidad que obtiene la banca por prestar dinero se reduce y, con ella, las ganancias-.

El supervisor bancario no ha actualizado en este informe sus proyecciones macroeconómicas para la economía española, después de que el gobernador, Pablo Hernández de Cos, advirtiera en el Congreso la semana pasada que anticipa "una revisión significativamente a la baja" del crecimiento de la economía nacional para este año. Para la publicación de nuevas estimaciones habrá que esperar hasta diciembre, pero el Banco de España ha vuelto a señalar en este documento que "el fuerte encarecimiento de la energía y la aparición de cuellos de botella en las cadenas de producción" son los principales riesgos a la baja para la recuperación. Los peligros que supondría un empeoramiento en la situación sanitaria pasan a un segundo plano, pero "se mantienen, aunque más contenidos".