La investigación arrancó después de que la Comisaría de Policía Nacional registrara diversas denuncias por parte de perjudicados de municipios cercanos.

Todas las estafas denunciadas compartían el mismo 'modus operandi': el autor de los hechos, haciéndose pasar por corredor de seguros, solicitaba dinero por tramitar pólizas sobre vehículos que luego resultaban ser fraudulentas.

El delincuente, tratando de evitar que las víctimas detectaran cualquier indicio de irregularidad, tramitaba los seguros a nombre de terceras personas, las cuales, cuando les giraban los recibos, hacían caso omiso pues figuraban como tomadores de seguros que no habían contratado y por vehículos que no eran de su pertenencia.

Las víctimas, al ser interceptados en algún control de tráfico aleatorio, conocían que no constaba seguro alguno sobre su vehículo.

Diversas pesquisas llevaron a los investigadores a una conexión entre todos los perjudicados, resultando ser la misma persona -un hombre de nacionalidad ecuatoriana- la que los había estafado. Los agentes han procedido a su localización y detención.