Los trabajos se llevarán a cabo en paralelo con la empresa concesionaria del servicio de abastecimiento y alcantarillado, Hidralia, y constará de tres fases, estando previsto el inicio de la primera de ellas para el próximo día 11 de noviembre. En total, la actuación supondrá una inversión de 2,4 millones de euros y el objetivo es que esté concluida para el próximo verano.

En todo momento, el equipo de gobierno y los técnicos municipales informarán a los vecinos del calendario que se seguirá, según ha afirmado este martes la alcaldesa, Ángeles Muñoz, durante el encuentro mantenido con residentes en la zona en el Centro Cultural Cortijo Miraflores para dar a conocer este proyecto, junto al concejal de Obras, Diego López, y el gerente de Hidralia, Fulgencio Díaz.

"Vamos a realizar una importante inversión en esta barriada para mejorar la calidad de vida de los residentes y comerciantes, renovando las infraestructuras de alcantarillado y abastecimiento de agua, así como de telecomunicaciones, alumbrado y riego y ampliando el acerado, entre otras acciones de las que daremos cuenta de forma puntual a los vecinos", ha destacado la regidora.

Asimismo, ha apuntado que solo la primera fase cuenta con un presupuesto de cerca de 900.000 euros dentro del plan anual de inversión en obras de Hidralia.

Además, la regidora ha señalado en el encuentro, que también ha contado con la presencia de la concejala del Distrito Oeste, Remedios Bocanegra, que "nuestro objetivo es interferir de la menor manera posible en el funcionamiento normal del barrio durante el desarrollo de esta obra, ya que nos encontramos en una zona con un importante número de negocios y de residentes".

Por su parte, el concejal de Obras ha detallado que la primera de las fases "comprenderá la avenida del Trapiche desde la calle Miraflores y Reino de Aragón hasta Salvador Rueda y en esa misma vía desde el Trapiche hasta la calle Postigo".

De igual modo, ha indicado que se actuará sobre una superficie de cerca de 3.000 metros cuadrados, en las que además de realizar la renovación de las infraestructuras, se mejorará la seguridad vial con la ampliación de aceras para permitir la correcta circulación peatonal, se construirán pasos de peatones inteligentes, se instalarán 23 metros de barandillas, una docena de nuevas luminarias y se revitalizará la imagen de la zona mediante la renovación del mobiliario urbano y la siembra de nuevo arbolado. Concretamente, solo en la primera fase se plantarán 22 ejemplares de magnolios, según ha especificado el edil.

En este sentido, ha resaltado que "en total, cuando estén terminadas las tres fases se habrán sembrado 70 árboles, más del doble de los que hay en la actualidad". "La finalidad es dotar a la barriada de Miraflores de una imagen más dinámica, más moderna y más noble a través de esta obra", ha recalcado asimismo López.

Por último, Díaz ha señalado que este tipo de actuaciones se enmarcan dentro de la colaboración público-privada de buscar fórmulas y dar soluciones al ciudadano, que permitan además una mejor ciudad".