Fiona Mavhinga es abogada y consejera ejecutiva de Camfed (Campaña por la educación femenina), movimiento panafricano que ha recibido el Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional 2021.

Esta organización está hecha por mujeres y para mujeres... ¿Qué cree que hace que una mujer ayude a otra?

Las mujeres como yo, cuyas familias quieren lo mejor para sus hijos, pero simplemente no tienen los recursos financieros para financiar nuestra educación, saben íntimamente lo que significa estar excluidas. Cuando Camfed intervino para apoyarnos, nuestras vidas cambiaron por completo. Y la parte más importante de ese apoyo fue la hermandad en la que nos graduamos: la Asociación Camfed de mujeres líderes. Estamos cambiando las normas de género, ganando respeto y reconocimiento por nuestro liderazgo. Los líderes tradicionales de nuestras aldeas y los líderes del mundo nos ven y nos escuchan. Cada miembro de la asociación, de media, apoya a otras tres niñas para que vayan a la escuela con sus propios recursos, además de servir de mentora, animar y transmitir sus habilidades a muchas más.

¿Cómo solventaron las conexiones educativas con las niñas aisladas de las zonas rurales durante la pandemia?

En situaciones como cuando la Covid llegó a nuestras comunidades y las escuelas cerraron, las guías educativas se encargaron de cerrar la brecha digital, ya que las niñas no tenían acceso al aprendizaje en línea. Conectadas entre sí y con el personal de Camfed en las oficinas nacionales y de distrito, por teléfono móvil, actuaron como primeros intervinientes: se asociaron con los Campeones de la Comunidad para apoyar a las niñas en persona (incluso con alimentos y artículos sanitarios); impartieron sesiones en la radio, divulgando nuestro plan de estudios de habilidades para la vida e información sobre la Covid, así como hablando con las familias sobre la protección de los niños; y distribuyeron recursos educativos, además de gestionar los grupos de estudio socialmente distanciados.

El columnista del 'The New York Times' Nicholas D. Kristof describió el trabajo de Camfed como "una máquina de movimiento perpetuo". ¿Cuál es el papel de los antiguos alumnos?

El modelo Camfed promueve un ciclo virtuoso de empoderamiento, apoyando a las niñas y jóvenes en cada etapa de su desarrollo. Nuestras guías educativas vuelven a sus antiguos colegios para ayudar a las niñas vulnerables. Suelen trabajar como voluntarias desde su experiencia durante un periodo de 18 meses, impartiendo el programa de habilidades para la vida y el bienestar Mi mundo mejor de Camfed. Son respetadas y se confía en ellas como educadoras y empresarias, y son embajadoras inigualables del poder de la educación para cambiar vidas.

"Nuestro enfoque de base garantiza que, una vez que una niña ha recibido apoyo en la educación primaria y secundaria"

¿En qué se convierten estas chicas que salen del aislamiento? ¿Se hace un seguimiento de ellas?

Nuestro enfoque de base garantiza que, una vez que una niña ha recibido apoyo en la educación primaria y secundaria, el apoyo continúa a través de nuestro ciclo virtuoso de empoderamiento, apoyando a más niñas, y pueden formarse como guía de aprendizaje o guía de transición. Estas apoyan a las chicas durante un periodo de 6 a 12 meses, cuando se acercan al final del primer ciclo de secundaria, ayudándolas a pasar de forma segura a ciclos superiores o, incluso, al empleo. Hasta la fecha, nuestras guías de transición han llegado a casi 128.000 jóvenes que abandonaron la escuela.

La formación que Camfed realiza en el ámbito de la llamada ‘agricultura climáticamente inteligente’ resulta muy interesante…

 Nuestro programa de guías agrícolas está dirigido por mujeres jóvenes que han terminado la escuela y se han formado en agricultura climáticamente inteligente (con métodos indígenas e innovadores como el riego por goteo, el acolchado, la plantación de árboles y la agrosilvicultura) con el apoyo de Camfed. Ellas, a su vez, forman a los pequeños agricultores que no tienen acceso a estos conocimientos. Trabajan con escuelas, gobiernos y grupos comunitarios para proporcionar comidas escolares nutritivas, proteger los árboles y la biodiversidad, construir cocinas más limpias y reducir los residuos. En 2019, nuestro programa de guías agrícolas fue reconocido con el premio a la Acción Climática Global de la ONU en 2019, destacando el poder de estas mujeres jóvenes que están encabezando la acción sobre el cambio climático en África.

"Lo que vemos en Afganistán es un ejemplo de la rapidez con la que los logros alcanzados por las mujeres y las niñas pueden deshacerse"

Aunque Camfed trabaja sobre todo en África, me gustaría preguntarle sobre la situación de las mujeres afganas y una posible solución a su completo aislamiento del mundo, de la sociedad y de la cultura.

La educación es un derecho fundamental y una cuestión de justicia, y todo el mundo tiene derecho a ella. Lo que vemos en Afganistán es un ejemplo de la rapidez con la que los logros alcanzados por las mujeres y las niñas pueden deshacerse, a menos que haya un esfuerzo global concertado para proteger los derechos de las niñas y las mujeres, y apoyar activamente su liderazgo. Las mujeres de Afganistán, incluidas las que ahora viven en otros países, son las expertas a las que hay que consultar en este caso.

¿Qué proyección tendrá en Camfed este Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional?

El premio llega en un momento muy importante, cuando la educación de otros millones de niñas en África está amenazada como consecuencia de la pandemia. Mis hermanas de la Asociación Camfed están dando pasos extraordinarios para salvaguardar la educación de millones de niñas, y el Premio Princesa de Asturias pone de relieve su liderazgo.