La presentadora Sandra Barneda tiene en La última tentación un papel distante, de mediadora y conductora, por lo que suele mantener las formas y trata de no reaccionar ante los sucesos y las palabras de los participantes de ese programa de parejas.
Sin embargo, hay sucesos que pueden incluso a su profesionalidad, como cuando uno de los concursantes sufre en exceso y es imposible no empatizar con ellos.
Es lo que le pasó a Barneda cuando Lucía vio las imágenes de su novio, Isaac, besando a Bela, siéndole por tanto infiel. Lucía pretendía mantenerse serena, pero en realidad era visible su dolor contenido, algo que conmovió a la presentadora.
"Te agradezco la endereza porque sé que no es fácil. Sé lo que querías a Isaac y lo siento", le decía Sandra Barneda emocionada y con los ojos al borde de las lágrimas a Lucía.
El dolor de Lucía era doble, pues en la primera ocasión en la que acudió a La isla de las tentaciones ya se enfrentó al trago de ver a su pareja, por entonces Manuel, serle infiel con otra participante.
No solo era Lucía la que se rompía al ver las imágenes de Isaac, también Marina, que fue pareja de Isaac antes que Lucía y que también sufrió los devaneos del joven en el amor y el sexo.
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