Este miércoles, La 1 emitió una nueva entrega de Lazos de sangre. En esta ocasión, el programa presentado por Boris Izaguirre se centró en Manuel Díaz, El cordobés. El torero, que participó en el formato, desveló que había perdonado a su padre, Manuel Benítez.

Alba Díaz presume de la relación que comparte con su ex, Javier Calle: "Agradecida de tenerte"

El exmarido de Vicky Martín Berrocal, que siempre ha luchado por que el también torero reconozca su paternidad, recordó cómo había sido crecer sin una figura paterna. Pese a estar exento de rencores, reconoció que se había convertido en una especie de vengador de su madre, que ansiaba reconocimiento y que le dieran su lugar: "Mi madre sufrió mucho, porque era como una deshonra tener un hijo natural en aquellas circunstancias", comentó.

Sobre su padre, en cambio, usó un tono muy distinto pese a la ausencia de resentimiento: "Ha sido muy valiente y a la vez muy cobarde. Quizás necesite a alguien que le escuche. Tenemos muchas cosas en común, pero hay algo en lo que somos diferentes, él está solo y yo no", reflexionó el torero. 

Y es que, su padre había negado su verdad, algo que le parecía recriminable, a diferencia de la falta de apoyo y cariño. "No se puede obligar a nadie a que esté, a que venga, pero sí se puede reivindicar el derecho a tu verdad y a existir. Uno nace porque alguien hace posible que la vida surja", aseveró.

Además, comentó que no sentía admiración por su progenitor como hombre, pero sí a nivel profesional. Sobre los posibles encuentros, el joven contó que una vez recibió una invitación de una tercera persona para ir a la finca de Ramón Sánchez para torear unas vacas con su padre.

Manuel Díaz se lo tomó con recelo y le propuso, en lugar de ese plan, que ambos se tomaran un café tranquilamente para, si iba bien, llevar a su familia a la finca más adelante. "Me haría una ilusión tremenda, pero dile que si quiere cojo mi coche y me tomo un café con él ahora mismo, quiero cinco minutos con él", respondió el torero sobre un encuentro que, finalmente, nunca sucedió.