Ya desde un primer momento, según han indicado desde la Policía Nacional, las manifestaciones de la denunciante pusieron en guardia a los investigadores, advirtiendo a esta persona de las responsabilidades en las que podría incurrir por simulación de delito.

El detenido, que fue puesto en libertad con cargos, interpuso una denuncia por robo con fuerza en el interior de una vivienda de Oviedo a principios de agosto, denunciado que los autores habían accedido a la vivienda fracturando la persiana de una ventana. Manifestó que le habían sustraído prendas de ropa, joyas y relojes, dos bicicletas de alta gama, así como un reloj Rolex y otros efectos.

Horas más tarde, este individuo se personó nuevamente en dependencias policiales para ampliar la denuncia, manifestando entonces que había observado que le habían sustraído mucha más ropa, por un valor de unos 2500 euros más.

Los investigadores observaron que en el año 2014, interpuso una denuncia idéntica, no solo por el modo de actuar de los presuntos autores, sino por los efectos que manifestó por entonces que se llevaron; unas bicicletas y ropa.

En el año 2016 interpuso una nueva denuncia por robo con fuerza en el mismo domicilio y misma ventana de acceso, denunciando la sustracción de una bicicleta eléctrica, un Rolex y prendas de ropa.

En el año 2017 el detenido fue víctima de una tentativa de robo con fuerza en el interior de su vehículo, aprovechando nuevamente la oportunidad para estafar el seguro, denunciando la sustracción de un chaquetón valorado en más de 350 euros. Cabe la circunstancia de que en este caso el autor fue detenido in-fraganti y no se le intervino prenda de ropa alguna.

El grupo investigador, igualmente pudo demostrar que el detenido había cobrado fraudulentamente indemnizaciones de las compañías aseguradoras.

También pudieron darse cuenta los investigadores que todas las denuncias se interpusieron en el mes de agosto, mes en el que debido a las vacaciones hay menos gente en las ciudades y es más proclive a que se cometan este tipo de delito, por lo que el detenido, pudo pensar que de esta manera pasaría desapercibido.

Simular ser víctima o autor de un delito está penado y castigado en el Código Penal, y de igual manera, dar parte a las compañías de seguros de esos hechos que se han denunciado falsamente, incurriendo en un delito de estafa.

Estas actuaciones, del todo reprobables, detraen efectivos policiales para su investigación, lo que perjudica gravemente la investigación de otros hechos que si son reales.

Tras detectar estos hechos, la Policía Nacional los pone en conocimiento de las diferentes compañías aseguradoras, como verdaderos perjudicados de estos "delincuentes", quienes posteriormente reclaman las cantidades que hayan podido ser abonadas como indemnizaciones, personándose en la mayoría de los casos como acusación particular en los procedimiento penales contra estos.