El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sostuvo este viernes que la alta inflación y el aumento "exponencial" de los precios de la energía es "transitorio", y subrayó que la recuperación de la economía española y del empleo es "fuerte". En su intervención en la clausura del III Foro La Toja-Vínculo Atlántico, el líder del Ejecutivo situó la reducción de la desigualdad como el principal reto del país y abogó por una "fiscalidad justa" para defender servicios públicos "fuertes" y, entre otros anuncios, avanzó la puesta en marcha de un proyecto estratégico que captará fondos europeos y buscará crear oportunidades de negocio en torno al español.

Para atajar los altos precios de la energía, Sánchez propuso seguir a nivel europeo el ejemplo de la compra centralizada de vacunas y poner en marcha una adquisición "conjunta" de gas, así como una reserva estratégica de este combustible a nivel comunitario, para "aumentar el poder de negociación" de los estados de la UE y rebajar los precios. Además, defendió que el Gobierno está "monitorizando" la situación y que ha tomado medidas para frenar el impacto de los altísimos precios del pool mayorista sobre el recibo que pagan los consumidores finales.

Sobre la desigualdad, el presidente dijo que se trata de un "grave problema" y una "injusticia", y puso como ejemplos el 26% de la población que está en riesgo de pobreza o exclusión, el 27% de tasa de pobreza infantil o el 18% de desempleo que sufren las mujeres, así como la brecha salarial entre estas y los hombres, que se aproxima a los 5.000 euros anuales, según dijo. "La exclusión socava la convivencia y la confianza en las instituciones democráticas", alertó el presidente, quien abogó por "eliminar desigualdades" no sólo por justicia, sino también para "impulsar el crecimiento económico".

En esa línea, también defendió una "fiscalidad justa" para financiar el "Estado del bienestar fuerte" que, a su juicio, "necesitamos", con "servicios públicos potentes" y medidas como el reforzamiento de la Atención Primaria sanitaria o el ingreso mínimo vital, que "ya protege a 800.000 personas" y se ha convertido en "un nuevo pilar del Estado del bienestar", apuntó. Sánchez se refirió asimismo al acuerdo para implantar un tipo mínimo efectivo del 15% en el Impuesto de Sociedades –uno de los puntos que separan a PSOE y Unidas Podemos en la negociación presupuestaria–, aunque se limitó a decir que espera que pueda ser ratificado en la próxima cumbre del G-20 para que se "erradiquen los paraísos fiscales".

En su intervención, el presidente hizo varias referencias a la importancia de los fondos europeos de recuperación, y anunció que próximamente se desplegarán ayudas de hasta 12.000 euros para la mejora de las "capacidades digitales" en empresas, de hasta 5.000 euros para la renovación de vehículos de flota en las compañías y que próximamente se pondrá un nuevo proyecto estratégico de carácter transversal para "generar oportunidades de negocio" basadas en "nuestro idioma común, que es el español".