El debate de las pensiones llega al Congreso de los Diputados en plena polémica por las declaraciones del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, el domingo pasado abogó por un "cambio cultural" para que "entre 55 y 75 años se trabaje cada vez más".
La Cámara Baja debatirá este jueves una enmienda a la totalidad con la que el PP pretende tumbar la primera parte de la reforma de las pensiones que abandera el ministro, que entre otras cosas vincula las pensiones con el IPC para que crezcan anualmente lo que lo hagan los precios. La iniciativa del PP no tiene visos de salir adelante, pero pondrá el foco sobre las incógnitas que rodean al llamado "mecanismo de equidad intergeneracional" que incluirá la reforma, y que podría conllevar una bajada en las pensiones de la generación del baby boom.
A finales del año pasado, la comisión del Pacto de Toledo del Congreso aprobó una serie de recomendaciones para reformar las pensiones con un amplio consenso, que incluyó al PP. Esa reforma se pondrá en marcha en dos partes: una primera en la que el Gobierno, de acuerdo con patronal y sindicatos, ha optado por abordar los asuntos menos polémicos –y que es la que este jueves se debate en sede parlamentaria–, y una segunda que, presumiblemente, incluirá los temas más espinosos, entre ellos la posible subida del periodo de cotización utilizado para calcular la cuantía de la pensión o el mencionado mecanismo de equidad.
Una de las medidas que el Ejecutivo quiere poner en marcha antes de fin de año, en el primer bloque de la reforma de pensiones, es la vinculación de la prestación con el IPC para que las pensiones suban año a año en función de lo que lo crezcan los precios. Este primer bloque, que también incluye medidas para fomentar la jubilación más tardía o saca determinados gastos del presupuesto de la Seguridad Social, lleva desde principios de mes en el Congreso, y lo que se debate y vota este jueves es el intento del PP de derribarlo para que no continúe su tramitación parlamentaria.
Los populares, en los últimos días, han puesto en duda que las pensiones deban ir ligadas a la inflación como establece la reforma del Gobierno. Así lo hizo, por ejemplo, el expresidente Mariano Rajoy, que aseguró a las claras hace unos días en la Convención Nacional del PP que "volver otra vez a la indexación de las pensiones al IPC es una equivocación".
No obstante, la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, trató el martes de suavizar sus palabras e hizo hincapié en que la oposición de los populares a la norma que se está tramitando se debe, fundamentalmente, a que no incluye la concreción del diseño del mecanismo de equidad intergeneracional, que el Gobierno quiere añadir a la ley más adelante a través de una enmienda.
El Ejecutivo se encuentra precisamente negociando con los agentes sociales la concreción final de este mecanismo, y se ha dado hasta mediados de noviembre para cerrar un texto conjunto. Por ahora, poco se sabe de él, pero ya generó polémica hace unos meses, pues Escrivá abrió la puerta a que conlleve pequeña reducción en la pensión de los nacidos entre 1960 y 1975 con el objetivo, dijo entonces, de garantizar la prestación de una generación mucho más numerosa que la inmediatamente posterior.
El recorte a los 'baby boomers'
El revuelo que generaron esas declaraciones, también entre Unidas Podemos y los socios parlamentarios del Gobierno, obligó entonces al ministro a matizar la propuesta, aunque poco más tarde insistió en que, a su juicio, para garantizar las pensiones a los boomers solo hay dos opciones: o pagarlas con impuestos, o "establecer mecanismos más selectivos", como una pequeña reducción de la cuantía. No obstante, no solo los socios de Escrivá están en contra de su propuesta: también patronal y sindicatos, con los que está negociando, se oponen a un sistema que baje las prestaciones de la generación del baby boom.
En este escenario, y habida cuenta de las incógnitas que rodean a este mecanismo de equidad intergeneracional, los populares exigen que el Gobierno lo lleve ya al Congreso para poder ser debatido en lugar de incluirlo posteriormente mediante una enmienda. "La reforma que ha presentado el Ejecutivo es incompleta, le faltan los asuntos fundamentales", y "el futuro de las pensiones hay que analizarlo de manera global, no como si estuviéramos en el camarote de los hermanos Marx", denunció este martes Cuca Gamarra, que exigió al Gobierno traer "completa la reforma para que los españoles sepan en qué consiste".
Es más: el PP ha comenzado a defender de nuevo públicamente el conocido como factor de sostenibilidad, el mecanismo impuesto por los populares en su reforma de las pensiones de 2013 que, precisamente, va a ser sustituido por el mecanismo de equidad. Esa medida adoptada en 2013 nunca llegó a ponerse en marcha, ya que el Gobierno del PP la aplazó por la oposición social y del resto de los partidos, pero conllevaba una reducción paulatina de las pensiones con la intención de adaptar el sistema a la esperanza de vida y así garantizar su sostenibilidad.
La formación que lidera Pablo Casado había mantenido un perfil bajo en relación a esta medida hasta hace unas semanas, pero en la enmienda que se debatirá este jueves en el Congreso se elogia esta herramienta y se afea al Gobierno que la derogue "sin haber previsto otro mecanismo que lo sustituya". Para el PP, lo que hace el Ejecutivo es "despreciar sin argumento válido y por mero interés partidista" el factor de sostenibilidad. Y los populares sostienen que la reforma promovida por el Gobierno "ignora la sostenibilidad del sistema y aplaza las decisiones de calado".
El Gobierno, por su parte, ha criticado duramente que el PP esté intentando tumbar la reforma de las pensiones y defienda el sistema anterior pese a la fuerte oposición social que generó. El tema se coló este miércoles en el intercambio dialéctico que mantuvieran el presidente del PP, Pablo Casado, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que acusó al líder de la oposición de querer revivir su "contrarreforma de las pensiones de 2013". "¿Usted está a favor de revalorizar las pensiones con el IPC? ¿Está a favor de validar el acuerdo de pensiones entre agentes sociales? Eso es lo que tiene que responder, porque eso se merecen los españoles", espetó Sánchez a Casado.
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