El festival ha tenido un nivel de ocupación total del 82,4%, una cifra que le ha permitido "recuperar" su programación previa a la pandemia del Covid-19.

Durante seis meses, han pasado por escenarios de siete municipios gerundenses - Calella de Palafrugell, Corçà, L'Escala, L'Estartit, Gualta, La Pera y Palafrugell- artistas como Stay Homas, Zoo, El Pot Petit y Oques Grasses, que agotaron las entradas de sus conciertos.

El director del festival, Fran Arnau, ha reconocido que esta ha sido una edición "difícil e incierta" pero ha destacado la buena acogida que asegura ha tenido por parte del público.

El festival ya está preparando su próxima edición, con la que celebrara su décimo aniversario y que será especial, "emblemática y pondrá de manifiesto la consolidación de un proyecto que ha contribuido a la dinamización cultural y social de la zona donde se celebra".