En una entrevista concedida al informativo matinal de RNE en Castilla y León y recogida por Europa Press, Óscar Puente ha reconocido que el sector de la hostelería "necesitaba un poco de alegría después de tanto sufrimiento" por lo que se siente recompensado porque hayan podido salvar el año.

Asimismo, ha explicado que la duda que tenía el equipo de Gobierno era o no hacer nada o celebrar las fiestas como se han celebrado, por lo que "a pesar de las muchas dudas y temores" el Ayuntamiento optó por "hacer lo máximo" y se congratula de que se despejara la duda y de los resultados obtenidos.

Por otro lado, sobre la recuperación de los espacios urbanos ocupados por la extensión de las terrazas y la tasa municipal, Óscar Puente ha dejado claro que son muchas las cosas que tratar con los hosteleros de la ciudad para ver cómo abordar la etapa de transición, aunque ha dejado claro que aunque las restricciones desaparezcan seguirá existiendo el temor al interior de los locales, por lo que las terrazas siguen siendo "un elemento de apoyo" al sector.

Asimismo, se ha referido al pintado de las calles del centro de la ciudad y ha explicado que para las vías peatonales el Consistorio tuvo que valorar qué pavimento usar, ya que los técnicos desaconsejaban el adoquinado "por el alto índice de trafico por los garajes y por el reparto de mercancías al comercio" ya que el adoquinado se rompe y crea problemas a los viandantes.

Por ello se optó por un pavimento "liso, económico y con un toque estético" y aunque ha reconocido que la primera opción aplicada en la calles Regalado y Menéndez Pelayo "no ha funcionado bien" ahora se ha optado por un mortero asfáltico que tiene el color carmesí "de la bandera de Valladolid" y que a priori, "da sensación de que va a dar buen resultado".

Por, ello ha asegurado que si este mortero asfáltico funciona se aplicará en las calles de la primera fase, a lo que ha añadido que no ha sido un "capricho sino una decisión muy reflexionada".