Puigdemont llama al independentismo a combatir el "derrotismo" y ERC, a no aprovechar la Diada para atacarse

Aragonès y Puigdemont reunidos en Waterloo.
Aragonès y Puigdemont reunidos en Waterloo en una imagen de archivo.
GENERALITAT DE CATALUNYA
Aragonès y Puigdemont reunidos en Waterloo.

Mensajes entrecruzados este lunes entre los partidos independentistas catalanes cuando queda menos de una semana para que el sábado se celebre la Diada. El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha hecho un llamamiento a combatir el "derrotismo" y a prepararse para un nuevo embate, ya que "la confrontación con el Estado no se puede rehuir". Por su parte, la portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha respondido que sería un "error" aprovechar el 11 de septiembre para lanzarse "ataques" entre las fuerzas representantes del independentismo. En este sentido, ha afirmado que "la fuerza del independentismo radica en que pueda haber un consenso estratégico, cerrar filas y poder ir a la una", para "plantar cara al Estado, no a un compañero de viaje".

Puigdemont se ha expresado así en una carta enviada a los afiliados del Consejo por la República, el espacio parainstitucional que preside desde Bélgica, en la que denuncia que la "represión" del Estado contra el independentismo se ha convertido en "permanente".

Según Puigdemont, "el movimiento independentista se tiene que preparar para la fase en que la respuesta del Estado vuelva a ser un 'no' a todo".

"No podemos dedicar más tiempo del que ya se ha dedicado discutiendo banalidades partidistas: la confrontación con el Estado no se puede rehuir, es una realidad inevitable por la que hemos de pasar si queremos que Cataluña sea reconocida como nación soberana e independiente", ha recalcado.

A su entender, no hay que "hacer creer a la ciudadanía catalana que, por alguna razón que desconocemos, vendrá un momento en el que nos será reconocida la nación sin tenerla que luchar desde las calles, plazas e instituciones del país".

Sin embargo, al independentismo no se lo ponen fácil "ni los que ya nos apalearon con extrema violencia el día del referéndum ni los que, cuatro años después, actúan como si aquella victoria les estorbase".

"Quizá por eso hay que combatir también una cierta corriente narrativa que intenta deconstruir la enorme gesta del 1 de octubre y extender un sesgo derrotista de un capítulo sobre el cual la historia hará un juicio unánime: votamos y ganamos, pese a la guerra represiva desatada por el Estado", ha destacado.

Puigdemont llama a "reforzar" el Consejo por la República -un instrumento que genera muchos recelos en las filas de ERC-, para que "no haya ninguna excusa para preparar la manera de ganar la próxima confrontación con el Estado".

Según el expresident, el Consejo por la República "es la institución republicana que recoge la legitimidad" del 1-O y se pone al servicio del independentismo para "poder completar la tarea iniciada hace ahora cuatro años".

"Decidimos que la lucha tenía que continuar, no detenerse", ha dicho, aunque en los últimos tiempos, "ya sea por los efectos de la represión, por los cálculos partidistas o por nuestros desaciertos, hay quien proyecta sobre el 1 de octubre y sus efectos políticos una visión muy alejada de lo que fue".

ERC pide ir todos a una

Vilalta ha alertado al independentismo que sería un "error" aprovechar la Diada del 11 de septiembre para lanzarse "ataques" entre "compañeros de viaje", a tan solo una semana de que se reactive la mesa de diálogo con el Estado.

Esta Diada, ha recalcado Vilalta en rueda de prensa, debe servir para "demostrar la movilización y la fuerza del independentismo", que deberá ser "canalizada" luego a la mesa de diálogo.

Pese al enorme escepticismo que genera la mesa de diálogo en las filas de JxCat, la CUP y la ANC, organizadora de la movilización de la Diada, Vilalta ha querido prevenirles para que se abstengan de fomentar cualquier demostración de protesta contra ERC.

"Sería un error que se aprovechase la Diada para atacar, señalar o criticar a otro compañero de viaje independentista, sobre todo la semana previa a la mesa de negociación, donde hemos de hacer valer nuestra fortaleza y capacidad de movilización", ha remarcado.

Después de que el expresident Carles Puigdemont haya llamado a combatir "una cierta corriente narrativa que intenta deconstruir la enorme gesta del 1 de octubre y extender un sesgo derrotista", Vilalta ha afirmado que "la fuerza del independentismo radica en que pueda haber un consenso estratégico, cerrar filas y poder ir a la una", para "plantar cara al Estado, no a un compañero de viaje".

También ha salido al paso de las declaraciones de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ha considerado "evidente que no hay ninguna condición para plantear un referéndum a corto plazo", y ha afirmado que "la gente está cansada de este pim-pam-pum por cosas menores" y "ya no está por tonterías".

Para Vilalta, la "tontería es no hacer caso al 80 % del país que pide una solución democrática en base a la autodeterminación y a la amnistía". "Nos sorprende la tozudez de los comunes en caer en la irrelevancia política", ha añadido.

La portavoz de ERC también ha advertido este lunes de que "no entendería" la ausencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la reunión de la mesa de diálogo sobre Cataluña, prevista para mediados de este mes.

Vilalta ha asegurado en rueda de prensa que ERC "trabaja" para que la mesa de diálogo cuente con la "máxima representación" por parte de ambos gobiernos y, por lo tanto, acudan no solo el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, sino también Pedro Sánchez.

"No entenderíamos otra cosa que no fuese la presencia de los dos presidentes", ha recalcado Vilalta, que considera que esta "mesa de negociación para resolver el conflicto político entre Cataluña y el Estado" ha sido "uno de los éxitos más grandes del independentismo".

Vilalta ha garantizado que Aragonès "estará" en la reunión, en la que "debe haber los máximos representantes de cada gobierno", porque lo que tienen entre manos "es muy gordo".

Además, ha dejado caer que un fracaso de la mesa de diálogo tendría consecuencias en la posición de ERC en el Congreso.

"Si se cerrase la vía de la mesa de negociación", ha alertado, "es evidente que sería mucho más difícil poder trabajar para buscar posibles acuerdos" en cuestiones como los Presupuestos Generales del Estado, las leyes en tramitación en las Cortes o la Comisión Bilateral.

JxCat cree que "imprescindible" que Sánchez asista a la mesa

La portavoz de JxCat, Elsa Artadi, ha afirmado, en la misma línea que Vilalta, que es "imprescindible" que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, asista a la reunión de la mesa de diálogo prevista para la semana del 13 de septiembre, ya que, de lo contrario, demostraría que "menosprecia" a la mesa y a la Generalitat.

En una rueda de prensa telemática, Artadi ha señalado que la presencia de Sánchez demostraría "que tiene un mínimo de interés en que el espacio funcione", porque el "debate" sobre su asistencia "no ayuda a resolver el conflicto".

Por ello, ha exigido "claridad" al Gobierno para que diga tanto si Sánchez asistirá o no y si la mesa "se reunirá o no" la semana del día 13.

Y ha recordado, en este sentido, que Sánchez sí que asistió a la primera reunión de la mesa celebrada el 26 de febrero de 2020: "Desde entonces se ha dedicado a buscar excusas".

"Tenemos que esperar a ver qué decide hacer el Gobierno español, que día tras día, a través de declaraciones, está cuestionando y poniendo en peligro este instrumento. Son ellos los que están debilitando este instrumento", ha señalado Artadi.

Aun así, no ha querido avanzar qué debería hacer el conjunto del independentismo si el presidente del Gobierno no asiste finalmente a la reunión: "Se hará en el momento en que se materialice".

La también vicepresidenta del partido ha dicho que las reticencias de Sánchez a su participación evidencian su interés "en cronificar el conflicto".

Por otro lado, Artadi ha explicado que Junts decidirá qué miembros formarán parte de la delegación catalana en función de si asiste Sánchez o no, del orden del día y de cuándo se reunirá la mesa de diálogo.

"La composición está abierta y está condicionada al cuándo, al qué y al quién", ha resumido.

El PSC reclama "abrir una nueva etapa en Cataluña"

El diputado del PSC en el Parlament y secretario primero de la Mesa, Ferran Pedret, ha presentado este lunes el manifiesto de los socialistas con motivo de la Diada, que lleva por título 'Abramos una nueva etapa', y que llama a la mayoría de la sociedad catalana a "abrir una nueva etapa en Cataluña".

En rueda de prensa, ha asegurado que es necesario "pasar página de las dinámicas de la política de la última década en Cataluña", y ha explicado que el manifiesto busca que el conjunto de fuerzas políticas se pongan de acuerdo para movilizar energías alrededor de seis objetivos: la recuperación económica, la reconstrucción social, la transición ecológica, el apoyo a los jóvenes, el combate de la desigualdad y el diálogo dentro de Catalunya y entre el Gobierno central y el Govern.

Pedret ha explicado que hay dinámicas del independentismo previas a la Diada que les preocupan, y ha reivindicado que esta jornada vuelva a ser de todos los catalanes: "Los independentistas quieren centrarla alrededor de sus reivindicaciones. Lo hacen con una gran desorientación estratégica y desunión".

Ha explicado que los socialistas catalanes asistirán a los actos y ofrendas florales tradicionales durante la Diada y ha descartado convocar un acto propio, ya que no ha sido su "tradición política", ha apuntado Pedret. 

En relación a las palabras de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, sobre un posible referéndum de autodeterminación, Pedret ha sostenido que les han sorprendido y que se acercan a posturas que el PSC había defendido antes: "Le damos la bienvenida a posiciones que hemos defendido estos últimos años. Un referéndum sobre la secesión en términos binarios no aporta soluciones a los problemas de Catalunya".

Pedret ha descartado posicionarse sobre si el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, debe asistir a la mesa de diálogo, que se celebrará la semana del 13 de septiembre, y también ha apuntado que es necesario que se produzca un diálogo dentro de Catalunya y que el Govern lo convoque.

El PSC no ha recibido ninguna llamada para invitarles a participar en el acuerdo por la autodeteminación que el presidente del Govern, Pere Aragonès, dijo que impulsaría antes de la mesa de diálogo, y ha calificado esta iniciativa de "enésimo intento de intentar recomponer la unidad independentista".

"Modestamente, creemos que el conjunto de la ciudadanía se está moviendo en otras coordenadas", ha sostenido Pedret, que ha apostado por un diálogo entre catalanes para llegar a un acuerdo que sea apoyado por la mayoría de la sociedad. 

También ha confirmado que con la renuncia del senador autonómico del PSC Manel de la Vega se activan los mecanismos del Parlament para sustituirle, y ha calificado de "gran satisfacción" que la actual vicepresidenta del Parlament y viceprimera secretaria del PSC, Eva Granados, sea propuesta para sustituirle y convertirse así en la portavoz del PSOE en la Cámara alta.

Ha afirmado que la Mesa del Parlament deberá admitir a trámite este mecanismo para elegir un nuevo senador autonómico y ha dicho que el PSC no ha debatido aún sobre quién ocupará el puesto de Granados en la Mesa en caso de que sea elegida como senadora autonómica.

Podem pide evitar que la mesa de diálogo sea "un espacio de fotos"

El diputado de En Comú Podem en el Parlament y portavoz de Podem Catalunya, Lucas Ferro, ha instado a que la mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat sea "resolutiva" y ha pedido evitar que se convierta en "un espacio de fotos en el que no se avance".

Así lo ha señalado en una rueda de prensa, en la que ha admitido que "evidentemente las fotografías y la imagen son importantes", pero ha llamado a dar prioridad en la mesa del diálogo, que tiene previsto reunirse la tercera semana de septiembre, a "desencallar el debate y comenzar a tener propuestas que permitan avanzar".

"No queremos que la mesa de diálogo sea un espacio de fotos en el que no se avance para conservar la posición de cada uno, sino un espacio en el que se puedan alcanzar acuerdos. Eso va por delante", ha enfatizado.

Ferro se ha expresado en estos términos después de que líderes independentistas como el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, o la presidenta del Parlament, Laura Borràs, hayan criticado la posibilidad de que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, no esté presente en la cita.

"Ojalá las fotos sean resultado de un acuerdo histórico que desencalle el conflicto con Cataluña y no el objetivo central (de la reunión)", ha indicado.

Por otro lado, ha avanzado que la formación morada acudirá, como cada año, a los actos institucionales de la Diada del 11 de septiembre, aunque lo más probable es que no haga lo mismo, ha dicho, con la manifestación que prepara la Asamblea Nacional Catalana (ANC) en el centro de Barcelona.

"Formalmente aún no lo hemos decidido (...), pero sería muy extraño que la propuesta de la ANC sea suficientemente inclusiva como para que nos podamos sentir representados", ha apuntado.

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