El Govern catalán estudiará pedir la declaración de zona afectada por situaciones de emergencia, la antiguamente conocida como zona catastrófica, para los municipios afectados por las inundaciones de este miércoles en la comarca del Montsià (Tarragona). 

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que se ha reunido con alcaldes y mandos de emergencias antes de visitar la zona afectada, se ha comprometido a evaluar conjuntamente los daños con los ayuntamientos y a garantizar que las ayudas para la restauración lleguen de forma efectiva y completa a los municipios, una demanda expresa de los alcaldes después de que no llegasen tras las inundaciones de 2018.

Rescate masivo por el temporal en el cámping los Alfacs de Tarragona: 70 personas aisladas en el restaurante

El presidente ha reconocido que, si bien las principales vías de comunicación ya están abiertas y operativas, todavía queda pendiente la recuperación de muchas calles y espacios de los municipios de Alcanar, Sant Carles de la Ràpita y Ulldecona. "Toca hacer la evaluación de los daños, conjuntamente con los ayuntamientos, y pondremos en marcha las medidas de restauración lo antes posible", ha apuntado.

Parte de los daños de los particulares, ha recordado, correrán a cargo de las aseguradoras. En paralelo, ha anunciado que el Govern también contribuirá a esta restauración. "Valoramos la posibilidad de pedir la declaración de emergencia de protección civil, lo que antes se llamaba zona catastrófica. Se evaluará en función de los daños para mejorar las ayudas a los municipios afectados", ha dicho.

Aragonès también ha querido dar respuesta al malestar de muchos alcaldes por los problemas administrativos que impidieron la llegada efectiva de las ayudas para el episodio de 2018. En este aspecto, se ha comprometido a acordar con los municipios las "bases" para acceder. "Tenemos que ponerlo en marcha. Tenemos el aprendizaje de 2018 de las cuestiones que hay que mejorar y lo tenemos presente para trabajar conjuntamente", ha remarcado.

EFE/Quique García

Después de episodios como éste, y también Gloria, Filomena y el incendio de la Ribera d'Ebre de 2019, Aragonès ha recordado que "llueve sobre mojado" en las Terres de l'Ebre con la reiteración de fenómenos extremos relacionados con el cambio climático. "Más allá de actuaciones de emergencia, son necesarias actuaciones estructurales para que haya más resiliencia y capacidad de resistir. Las medidas de apoyo del Govern tendrán en cuenta esto. Lo hemos trabajado con los alcaldes", ha precisado.

Defiende el sistema de alertas

Dos personas y dos perros, atrapados en un coche por las inundaciones en el Delta del Ebro

El presidente de la Generalitat, que ha agradecido en varias ocasiones la labor y el papel de los cuerpos de emergencias durante el episodio, ha salido también en defensa del sistema de alertas de emergencias tras las críticas por la falta de previsión de los aguaceros torrenciales de este miércoles en el Montsià. Según ha remarcado, "ninguno" de los modelos públicos en el ámbito catalán, español o europeo, ni tampoco los privados -como los que usan las compañías eléctricas- llegaron a prever esta situación.

"Es un fenómeno muy concreto que no pone en cuestión el sistema de alertas previsto y que ha funcionado bien en otras ocasiones. Se produjo un cambio muy precipitado, en muy poco tiempo, y obligó a hacer la alerta cuando ya se estaba produciendo y era más para paliar los efectos y prevenir que para hacer una preparación con mucho tiempo ", ha señalado.