La refugiada afgana Nadia Ghulam, que llegó a España en 2006, ha liderado la elaboración de menús de comida por parte de la ONG del chef José Andrés, World Central Kitchen, a más de 2.000 compatriotas acogidos en la base de Torrejón de Ardoz tras ser evacuados de su país, a los que transmite un mensaje de esperanza. "Es posible reconstruir la vida después de lo que hemos sufrido", asegura Nadia en una entrevista a Efe.

Con la llegada de los primeros refugiados de Afganistán a España tras la toma del poder por parte de los talibanes, la ONG World Central Kitchen se puso en contacto con la Cruz Roja, encargada de su nutrición, para ofrecerle la posibilidad de preparar comida afgana.

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La refugiada afgana Nadia Ghulam se ha encargado de liderar desde el jueves 26 de agosto esta iniciativa, que finalizará previsiblemente este lunes tras reubicar a todos los que estaban temporalmente acogidos en la base de Torrejón de Ardoz.

Nadia llegó a España en el 2006 como refugiada, después de que en el año 1991, durante la guerra civil afgana, resultase malherida cuando la casa de su familia fue destruida por una bomba. Desde entonces trabaja como escritora y trata de ayudar a las personas de su país a través de varias iniciativas.

Tras el control de Afganistán por parte del régimen talibán, se sentía "con las manos atadas" al no saber "cómo ayudar", hasta que recibió un mensaje por parte de la ONG World Central Kitchen para liderar el reparto de comida. Cogió un avión y viajó desde Barcelona (donde reside actualmente) hasta Madrid con el encargo de diseñar un menú para sus compatriotas recién llegados a España.

"Es importante para ellos llegar aquí y encontrarse con una afgana que hable su idioma, prepararles una comida a su gusto y darles un abrazo, empatizar con ellos, que vean que soy una refugiada, que me han castigado en todos los sentidos, pero que es posible, a pesar de todos los dolores, vivir y dar fuerza y energía a otras mujeres", comenta emocionada.

Nadia recibía a sus compatriotas con miradas y caras "tristes" pero cuando les servían un plato de comida se "transformaban en una sonrisa", lo que le ha dado fuerzas para seguir con su tarea, aunque lamenta que miles de afganos "no han podido salir y están atrapados" en su país.

Ahora, la escritora continuará ayudando a los refugiados llegados recientemente a España como educadora social, ya que conoce bien su país y sabe el "dolor que están pasando". Nadia ha liderado la elaboración de los menús en las cocinas de la World Central Kitchen ubicadas en el barrio de Santa Eugenia, en Villa de Vallecas, junto a chefs de la ONG.

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Unos 300 voluntarios se han encargado del envasado de estos menús de desayuno, comida y cena, que eran transportados hasta la base de Torrejón de Ardoz en camiones.

"Era trasladarles el mensaje de que les podían quitar su tierra, su identidad, hasta la vida, pero nadie podía quitarles su comida, sus costumbres. Es una forma de darles un abrazo a través de la comida", comenta a Efe una de las voluntarias, que insiste en que estos menús no solo trataban de cubrir las necesidades básicas, sino ofrecerles una llegada más reconfortante a un país extranjero.