Las zonas que se están tratando estos días son La Cabeza, en la Puerta de Segura, y las zonas altas de Génave y Villarrodrigo, todas ellas con unas poblaciones que superan los umbrales a partir de los cuales este insecto produce "daño económico", según ha indicado este viernes la DO.

Estos tratamientos son financiados entre las almazaras inscritas a través de diversos convenios alcanzados. Ya el año pasado, estos tratamientos colectivos se realizaron en Chiclana de Segura, Benatae, Hornos de Segura, La Puerta de Segura, Orcera, Segura de la Sierra, Puente de Génave, Siles y Villarrodrigo. Este año, se han sumado los municipios de Génave y Torres de Albanchez.

"Para el Consejo Regulador, es muy satisfactorio que cada año exista una mayor extensión de olivar amparado con este control, pues ello redunda en la producción de aceites de oliva virgen extra de calidad", ha asegurado.

Y es que, según ha añadido, su experiencia señala que "los tratamientos colectivos terrestres con cebo son más efectivos que las aplicaciones que puedan realizar los agricultores de forma individual", ya que se trata una superficie mayor y homogénea, en el momento más óptimo según los índices de ataque de la mosca obtenidos con un monitoreo semanal.

La Denominación de Origen Protegida Sierra de Segura es la DO oleícola más antigua de Andalucía con más de 40 años de vida. Ampara 48.000 hectáreas de olivar de montaña, de las que más de 16.000 se encuentran en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas. Actualmente, cuenta con 22 industrias entre almazaras y envasadoras y más de 8.000 agricultores inscritos.