Coto considera "un fracaso político que el hermoso casco histórico continúe su proceso de deterioro, reconvertido en espacio para grafittis y violencia callejera".

La concejal de Vox, que lamenta que el equipo de gobierno no escuche a los vecinos de la zona, conocedores de la problemática existente, asegura que "resulta lamentable que los más afectados afirmen que esto es el pan nuestro de cada día. Apoyamos su reivindicación de establecer puestos de vigilancia fijos en las zonas más conflictivas".

"Con preocuparse por los hechos y reivindicar sus planes el bipartito no arregla nada, sigue faltando personal", advierte Coto, quien resalta que "llevamos dos años escuchando hablar de la policía de barrio, la videovigilancia y la búsqueda de alternativas para el Antiguo a la vez que votan en contra de nuestras propuestas y alegan la titularidad privada de los inmuebles para no instalar videocámaras".