El Congreso prepara la exposición permanente sobre el parlamentarismo que instalará en el sótano del Palacio

  • Todavía no se ha fijado una fecha para la inauguración.
Fachada del Congreso de los Diputados donde durante la jornada de hoy se está celebrando un pleno de sesión de control al Gobierno centrado en las medidas post-COVID 19, la derogación de la reforma laboral y la destitución por parte del
Fachada del Congreso de los Diputados.
Eduardo Parra/Europa Press
Fachada del Congreso de los Diputados donde durante la jornada de hoy se está celebrando un pleno de sesión de control al Gobierno centrado en las medidas post-COVID 19, la derogación de la reforma laboral y la destitución por parte del

El Congreso de los Diputados ha empezado ya los preparativos para la futura instalación de la exposición sobre la historia del parlamentarismo español que acogerá de forma permanente en el sótano del Palacio de la Carrera de San Jerónimo.

Todavía no se ha fijado una fecha para la inauguración de esta muestra que podrán recorrer todas las personas que visiten la sede parlamentaria. De hecho, el Congreso aún no ha recuperado las visitas a las que se puso fin en marzo de 2020 con motivo del estallido de la pandemia del coronavirus.

Sin embargo, según han explicado en fuentes parlamentarias, si la evolución de la pandemia lo permite, no se descarta intentar que la muestra esté lista la celebración el próximo mes de diciembre del 43 aniversario de la Constitución de 1978.

Por lo pronto, la Cámara ha convocado un concurso para adjudicar el contrato destinado a la adquisición de la infraestructura museística necesaria para la exposición, que llevará el título de Democracia, Parlamento, Constitución y que hará un repaso de las distintas etapas de parlamentarismo español desde las Cortes de Cádiz hasta la actualidad.

Se exhibirán parte de los fondos de la institución, formados por múltiples objetos y documentos, entre ellos las credenciales de los miembros del Congreso más destacados o los Diarios de Sesiones de debates trascendentales, que ya se han podido ver en algunas exposiciones temporales que se han ido organizando en los últimos años.

El contrato, con un presupuesto base de licitación de 218.622,80 euros, impuestos incluidos, es para la fabricación de los elementos que han de formar parte de la exposición (esculturas, maquetas, elementos gráficos), así como del equipamiento audiovisual y de control medioambiental y el montaje e instalación de todo ello.

Según los pliegos acordado por la Mesa del Congreso los recursos deberán diseñarse para ser usados por personas con capacidades diferentes.

Todo accesible

Así, los recursos de audio tendrán una versión escrita, normalmente en subtítulos, se tendrá en cuenta a los usuarios de sillas de ruedas, se usarán macrotipos y tipos de letra de alta legibilidad.

Además, las piezas, muchas de ellas de pequeño tamaño, no se expondrán en una altura superior a los 110 centímetros. Se evitarán los espacios oscuros, salvo cuando la conservación de las piezas expuestas lo exija.

La idea es que todas las vitrinas sean frontalmente accesibles para el público en silla de ruedas y, si son en voladizo, deberán ser marcadas en el suelo para poder ser detectadas por personas ciegas con bastón.

Parte de los textos de la exposición permanente irán en castellano, catalán, euskera y gallego, que se identificarán con distintos colores y toda la instalación se guiará por los principios de adecuación, flexibilidad y sostenibilidad.

El edificio principal de la sede parlamentaria está asentado sobre el antiguo Convento del Espíritu Santo, fundado en el siglo XVI y que estaba vacío desde 1823 tras sufrir un incendio. Aquel convento de monjes fue derribado en 1843 con el fin de construir la que a partir de la época isabelina viene albergando la sede del Parlamento español.

El sótano del Palacio ya fue objeto de una profunda rehabilitación hace una década, siendo presidente del Congreso el socialista José Bono, que incluso planeó abrir un restaurante bajo el hemiciclo, un proyecto que finalmente se abortó.

Se abrió al público por primera vez en 2018

Después se pensó destinar parte de esas dependencias a acoger el archivo de la Cámara, una idea que también acabó desechándose por motivos de seguridad. Hasta su última remodelación el sótano se utilizó para guardar muebles y otros enseres de la institución.

La primera vez que se abrió al público fue en diciembre de 2018 cuando, con motivo de 40 aniversario de la Constitución, acogió parte de una exposición organizada entre el Congreso, el Senado y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.

Entonces solo se había habilitado para su uso museístico una parte del sótano, ahora que ya han finalizado las obras se podrá instalar la exposición permanente sobre el parlamentarismo cuyos preparativos ya han arrancado.

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