El segundo dispositivo de fin de semana desplegado en Cataluña para velar por el cumplimiento del confinamiento nocturno en vigor en 165 municipios se ha saldado con 1.411 actas levantadas por sanciones administrativas. 

Son "el doble que en el mismo periodo del fin de semana anterior, cuando fueron 710", ha confirmado este lunes en rueda de prensa el comisario en jefe de los Mossos d'Esquadra, Joan Carles Molinero. La mayoría de estas sanciones se han interpuesto (912) "por incumplir las restricciones de movilidad nocturna durante el horario de confinamiento" decretado por el Govern.

Otras 160 multas se han puesto por un uso indebido de la mascarilla y, el resto, hasta llegar a las 1.411 actas, por incumplir aforos, por participar en botellones en espacios públicos y por no respetar el horario de cierre de locales. Este pasado fin de semana se han llevado a cabo 70 controles más por parte de efectivos tanto de Mossos como de agentes de seguridad ciudadana, tráfico y orden público.

En la ciudad de Barcelona, las principales intervenciones policiales se han llevado a cabo en las playas del Somorrostro y la Barceloneta así como en el Passeig del Born, la plaza del Macba y el entorno de las Tres Xemeneies, lugares habituales de concentración de jóvenes para celebrar botellones. 

Otras poblaciones catalanas en las que se ha intervenido han sido Tarragona, Gurb, Gironella, Sant Carles de la Ràpita, Llívia o Hostalets de Pierola. Sobre todo, para avisar de que no se podía permanecer en la calle de fiesta a partir de las 00.30 horas. 

El perfil de las personas advertidas ha sido diferente en función de las zonas de actuación, ha detallado el comisario Molinero. Mientras que en la ciudad de Barcelona corresponde a turistas extranjeros que decían desconocer las restricciones por la Covid en vigor, al igual que en otros núcleos de costa, en las ciudades de interior responde a personas autóctonas o de poblaciones colindantes "que se desplazaban de un lugar a otro en franja de confinamiento".