Kiko Rivera utiliza su infancia para atizar a Isabel Pantoja: "Me faltó más amor que juguetes"

Isabel Pantoja y Kiko Rivera, en una foto publicada por el DJ en su cuenta de Instagram.
Isabel Pantoja y Kiko Rivera, en una foto publicada por el DJ en su Instagram.
EUROPA PRESS
Isabel Pantoja y Kiko Rivera, en una foto publicada por el DJ en su cuenta de Instagram.

Una vez que parecen terminados y desmentidos de una vez por todas los rumores de crisis entre Irene Rosales y Kiko Rivera, el músico ha aprovechado el fin de semana para mirar atrás, hacer recapitulación y entender la otra gran relación de su vida que, esta vez sí, está más que rota: la que tiene con su madre, Isabel Pantoja.

El sevillano de 37 años ha tirado de nostalgia en su Instagram, donde tiene más de un millón de seguidores, y ha publicado una fotografía de su más tierna niñez junto a un texto en el que no solo ha reflexionado sobre el paso del tiempo sino que también ha aprovechado para lanzar una pulla a la folclórica, dardo envenenado que ha sido muy aplaudido por sus fans.

El DJ ha hablado abiertamente de los años que lleva, sin pedirlo, expuesto al foco mediático, y el papel de su familia en todas esas emociones. "37 años en el ojo del huracán, a veces para bien, a veces para mal. No elegí ser conocido, simplemente me tocó, siempre observado y siempre vigilado. Me ha dado muchas cosas, pero también me las ha quitado", ha comenzado diciendo.

Con una imagen en la cuna cuando aún era bebé, Kiko Rivera se ha preguntado si había sido feliz y la respuesta es un contundente "Sí". "Aunque me faltase más amor que juguetes, sí", ha añadido junto a un emoticono de lanzar un beso. "Hoy en día mi vida ha cambiado mucho (ya sabéis todos por qué) y me sigue costando asimilar muchas cosas, pero como todas las heridas, esta también sana", ha explicado.

"Quiero deciros con esto que aunque tenga días grises y tristes, que los tengo, hoy quiero volver a ser ese niño que estaba con sus padres y familia", ha agregado, "y aunque no recuerde o no supiese lo que la vida me tenía preparado, era muy feliz".

"La vida continúa, familia virtual, y ahora soy yo el que no debo permitir que mis hijos piensen como yo pienso hoy en día", ha terminado con otro ataque a su progenitora. "¡Os quiero mucho!", ha finalizado, añadiendo una posdata humorística, para que no haya malentendidos: "No es mi cumpleaños".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento