Cuando la nueva ley del Gobierno entre en vigor, eliminando la publicidad de TVE, quedarán vacías y disponibles unas 8.200 horas, que la cadena pública deberá ocupar con contenidos. Ahora el presidente de la corporación, Luis Fernández, ha anunciado que parte de ese tiempo se dedicará a los informativos, que verán cómo su tiempo de emisión se estira.
Pero no es la única solución que se está barajando en este momento. Además, las series de producción propia de la cadena podrían ampliar la duración de sus episodios, para ir llenando los huecos que dejarán los spots.
A la espera de conocer el texto definitivo de la ley que será aprobada por el Congreso, la programación de TVE será muy similar a la que ha venido viéndose, dado que la cadena debe respetar algunos contratos publicitarios hasta finales de año.
Según informó la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, el próximo 21 de julio tendrá lugar la próxima reunión del consejo de administración de RTVE, y se abordará parte del futuro de la televisión pública.
Se trata de una carrera a contrarreloj, ya que el Gobierno ha establecido como plazo el próximo mes de septiembre para que entre en vigor la nueva ley. No obstante, la corporación no cerrará un plan hasta su aprobación definitiva, que podría verse atrasada por los plazos parlamentarios.
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