Tras la amplia remodelación del Gobierno central -con siete cambios de ministros, aunque todos socialistas-, PSOE y Podemos fijan ya la hoja de ruta para completar los dos años que restan de legislatura, en los que serán clave los Presupuestos del próximo año. Las negociaciones, según han confirmado hoy los 'morados', comenzarán la semana que viene y en ellas la formación que ahora dirige la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se ha marcado como objetivos la "actualización" del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y un tipo mínimo del 15% en el Impuesto de Sociedades.

Díaz: "Han de ser los presupuestos que redistribuyan la renta de los que más tienen"

Así lo ha explicado Nacho Álvarez, secretario de Economía de Podemos, en una reunión con los diputados del grupo confederal que se ha celebrado este martes en el Congreso de los Diputados y que también ha presidido la propia Díaz. Está previsto que el techo de gasto de las cuentas públicas se apruebe en el próximo Consejo de Ministros, el próximo martes 27. Después, Álvarez se reunirá, como en otros años, con la ministra de Hacienda y ex portavoz del Gobierno, María Jesús Montero. Una vez que alcancen un acuerdo, los presentará el presidente Pedro Sánchez junto a Díaz, para ser negociados con el resto de grupos, pues al ser una ley, debe ser aprobada en el Congreso de los Diputados.

En esas negociaciones, el secretario económico de los 'morados' ha asegurado que pedirá medidas "expansivas" para continuar con la senda iniciada este año y "consolidar la recuperación". En este sentido, ha pedido no retirar "antes de tiempo" los estímulos fiscales ni dejar sin efecto la suspensión de las reglas fiscales, que suponen la no obligación de alcanzar unos objetivos de déficit.

Con esas recetas, Podemos pedirá "actualizar" el salario mínimo, una reivindicación que ya ha vivido un tira y afloja entre los socios en los últimos meses. Díaz defiende un aumento para este año de entre 12 y 19 euros frente a la posición de la ministra de Economía, Nadia Calviño, que exige mantener congelado el índice. Sánchez por el momento no ha decidido, aunque en enero ya se decantó por la congelación y el mes pasado asumió parcialmente el discurso de Calviño haciendo hincapié en que "ahora mismo lo relevante es la creación de empleo y la consolidación del crecimiento económico".

Bajo este marco, Díaz pidió al presidente "valentía", al igual que con los indultos del procés, a comienzos de este mes. Este martes, pese a que no se ha referido directamente a esta medida, Díaz sí ha pedido acabar "con las viejas recetas de la austeridad, que se fundamentaban en propiciar sufrimiento y recortes". Cabe destacar que la subida del salario mínimo también es solicitada por gran parte de los votantes de ambas formaciones. Dos de cada tres socialistas compartirían esta medida; mientras que entre los votantes de Podemos esa cifra sube a cuatro de cada cinco, de acuerdo con la encuesta elaborada por DYM para 20minutos el mes pasado.

Díaz y los sindicatos aprietan a Sánchez para subir el salario mínimo: "Tengamos la misma valentía que con los indultos"

La vicepresidenta, que relevó a Pablo Iglesias como máxima voz de UP en el Gobierno tras la decisión de éste de saltar de la Vicepresidencia primera a la candidatura de Podemos en Madrid y, tras los malos resultados, a la dimisión, ha pedido dar con estos Presupuestos respuesta a "la crisis social, climática y de cuidados".

Respecto a la fijación del tipo mínimo del Impuesto de Sociedades, tanto Álvarez como Díaz lo han enmarcado en la reforma fiscal que pretenden acordar con el PSOE. Así, la vicepresidenta segunda ha incidido en la necesidad de reforzar los ingresos públicos a través de los impuestos y ha recordado que España tiene una "brecha" del 7% respecto a la media de impuestos en el resto de Europa.

"Estas cuentas tienen que servir para desplegar con fuerza la agenda social del Gobierno; si no es ahora, ¿cuándo?", ha lanzado ante los diputados de UP. De la misma manera, ha pedido que el crecimiento que se prevé para los próximos años -a finales de 2022 se alcanzará el nivel de producción de antes de la pandemia- "llegue a todos los hogares", fijándose como prioridad las políticas que afectan a jóvenes, mayores y mujeres. Es decir, medidas para garantizar "la accesibilidad del alquiler, un trabajo digno, prestaciones reconocidas" y, también, la "igualdad de condiciones".