Jada Pinkett Smith le da la bienvenida a una nueva década en su vida con un look totalmente diferente, aunque no tan inesperado. La artista ha sido convencida por su hija pequeña Willow, que lleva años con el mismo estilo de pelo, para raparse por completo la cabeza. 

En los últimos años, Pinkett ha aparecido en la mayoría de sus apariciones públicas con un peinado muy corto, o incluso un pañuelo cubriéndole la cabeza.

Según ella misma confesó en su podcast Red Table Talk, con la edad había comenzado a sentir pérdidas de cabello. Por lo que la idea de acabar con el problema cortándose todo el pelo ya había rondado su mente muchas veces. 

Así lo cuenta ella en la publicación que muestra su nuevo look en un selfie junto a su hija: "Willow me obligó a hacerlo porque era el momento de liberarme"

"Mis 50 años están a punto de ser divinamente brillantes con este rapado", añadía junto a un vídeo donde se pueden ver los ángulos del corte. 

Willow también compartió las noticias en su cuenta de Instagram y recalcó la importancia de este nuevo aspecto, más allá de lo estético: "Un regalo es puro cuando se da de corazón a la persona adecuada en el momento y lugar adecuados, y cuando no esperamos nada a cambio".

Jada Pinkett Smith por fin se encontraba en el momento adecuado para comenzar a verse a sí misma de manera diferente sin importar su aspecto exterior.