La vocación, único incentivo de los abogados de oficio, que reclaman más medios: "Es imposible vivir de ello"

Archivo - Juzgados de Plaza de Castilla
Archivo - Juzgados de Plaza de Castilla
EUROPA PRESS - Archivo
Archivo - Juzgados de Plaza de Castilla

El 98% de los españoles cree que quien carece de recursos económicos tiene derecho a contar con la asistencia gratuita de un abogado. Es la principal conclusión de un estudio de Metroscopia realizado para el Consejo General de la Abogacía Española. Sin embargo, este mantra, que ahora es de todos, no siempre fue una realidad: la asistencia jurídica gratuita no se implementó en España hasta 1996. Uno de los pilares fundamentales de este servicio que presta el Estado son los abogados de oficio, que sin embargo ven la vocación como único motivo al que aferrarse, pues denuncian que están mal pagados y que en muchos casos reciben esa contraprestación con retraso.

"Es imposible vivir del turno de oficio", asegura en una conversación con 20Minutos el letrado Miguel Gala. Él es abogado de oficio desde 2011, una decisión que tomó para "devolver a la sociedad" toda la suerte que él, explica, ha tenido. No hay mucho más donde poder aferrarse, a tenor de los datos que proporciona. Por cada proceso -que no puede abandonar a no ser que sea derecho penal- cobra unos 300 euros, con lo que consigue ganar unos 6.000 al año. "Solamente con ir una vez a comisaría con un cliente particular ya gano esos 300 y en el turno de oficio pagan 2 euros la hora, como mucho", argumenta.

Una motivación similar tiene Amparo Francisca Banqueri, que empezó en el turno de oficio hace 34 años, en 1987. "Mi vocación siempre fue defender a las personas de la forma más altruista posible. Lo bueno del turno de oficio es que te implicas con las personas más vulnerables", resume. En su caso, obviamente, este trabajo también complementa al que realiza en su despacho. Según comenta, la profesión del abogado de oficio debería "dignificarse", porque denuncia que no se les trata como "la pieza del ajedrez tan importante" que son. "Hay que pagarles más", pero no solo, dice: "También nos tienen que pagar a tiempo". Ese retraso, añade, ha llegado a provocar que otros letrados hayan tenido que firmar conciertos con bancos para que les adelanten el dinero que van a cobrar.

Ambos coinciden también en reivindicar un mejor trato por parte de las autoridades con las que trabajan. Y es que, si bien ni el juez ni el fiscal ya tienen turnos de guardia, ellos sí. "Te pueden llamar a las 3, a las 4, a las 5...", dice Banqueri. "Y eso cuando no te dan tiempo a estudiarte los expedientes o te dificultan el trabajo de otras formas", añade Gala.

Incidencias y carencia de recursos, otros problemas

Estas reivindicaciones se trataron el pasado 12 de julio en una jornada que organizó el ICAM para conmemorar el 25 aniversario de Ley 1/1996 de Asistencia Jurídica Gratuita. El abogado Eugenio Ribón, diputado del Colegio de Abogados de Madrid, señaló también como reivindicaciones la necesidad de revertir la "carencia de recursos materiales" y "la inadecuada agenda judicial" que sufren diariamente los 42.265 profesionales que "hacen posible que la Justicia gratuita sea posible". 

En esos "enormes retrasos" puso el foco igualmente Concepción Rodríguez, de la asociación Foro Judicial Independiente. Según argumentó, España tiene 12 jueces por cada 100.000 habitantes, frente a los 21 de media de la Unión Europea. A esto hay que sumarle la “altísima litigiosidad” y la poca inversión pública: mientras que Alemania destina 180 euros por cada 100 habitantes a la Justicia, España aporta 100.

Impagos y baremos sin actualizar

Otro de los problemas a los que se pueden llegar a afrontar los abogados de oficio es no recibir el pago por los servicios prestados. Así lo denuncian desde el Observatorio de Justicia Gratuita. Fuentes del organismo tachan de positivo el reglamento de asistencia jurídica gratuita aprobado en marzo del pasado año (en el que, por cierto, los abogados de oficio atendieron casi 1.600.000 asuntos, un descenso del 19% respecto al año anterior), pero lamentan que no se hayan actualizado los baremos que ponen precio a los servicios de los abogados y que no se haya encontrado una vía legal para asegurar que siempre cobren.

Y es que, en ocasiones se producen situaciones de impago. Por ejemplo, cuando un cliente solicita la asistencia jurídica gratuita (no siempre el abogado de oficio significa que el servicio sea gratis, aunque sí más barato) y finalmente se le deniega por causas derivadas de la actuación del cliente o porque el servicio prestado no está incluido en el baremo que marca la legislación.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento