A partir de la semana que viene podrán comprarse test de autodiagnóstico de la Covid-19 -de antígenos o de anticuerpos- en las farmacias sin necesidad de receta médica.
Así lo ha anunciado este martes la ministra de Sanidad, Carolina Darias, quien ha destacado que la regulación de la venta al público de estas pruebas permitirá "identificar de forma más rápida sospecha de casos positivos e incluso de asintomáticos, como está ocurriendo en la población de 12 a 29 años, y controlar de la manera más eficaz posible la progresión de la pandemia".
El 20 de julio se aprobará el Decreto en el Consejo de Ministros que permitirá la venta de estas pruebas y permitirá a las farmacias realizar publicidad sobre estos productos. Esta es una demanda que los farmacéuticos llevan reiterando meses, pues cuentan en sus establecimientos con multitud de pruebas de diagnóstico (en Madrid, por ejemplo, desde febrero), pero solo están autorizados a venderlas con prescripción médica. "La exigencia de prescripción constituía una barrera", ha admitido la ministra.
¿Qué pruebas se venderán?
Se permitirá la venta de los test de antígenos y de los de anticuerpos, según planteó Sanidad en el borrador de la norma, publicado en mayo. "Han empezado a comercializarse en Europa pruebas rápidas de antígeno de autodiagnóstico. La disponibilidad de estos productos permitirá a la población general la realización de las pruebas sin la intervención de un profesional sanitario, lo que por un lado reducirá en cierta medida la presión asistencial de los centros sanitarios y permitirá la identificación rápida de sospechas de casos positivos", establece el texto.
Asimismo, se incluirán también otro tipo de prueba rápida de diagnóstico, la de anticuerpos, "que aunque no sirven para la detección de infección activa, exceptuarlos de la prescripción, contribuirá igualmente a reducir la presión asistencial del Sistema Nacional de Salud", indican.
¿Cómo funcionan?
Las pruebas que se aprobarán serán las de detección rápida, por lo que suelen ser las más baratas, pero también las menos fiables.
La de antígenos, por ejemplo, tarda 15 minutos aproximadamente (según el fabricante) en proporcionar el resultado. No obstante, presenta la desventaja de que el nivel de fiabilidad es considerablemente al que podría tener una PCR. Funcionan detectado la proteína del virus (la famosa 'proteína S'), generalmente a través de exudado nasofaríngeo o nasal, aunque en algunos casos se puede hacer con una muestra de saliva.
Por otra parte, la de anticuerpos no detecta específicamente la infección de coronavirus, sino el nivel de anticuerpos en sangre que ha desarrollado -o no- el organismo y, por tanto, si se ha estado en contacto con el virus. Los resultados se obtienen a los pocos minutos, y el tiempo varía según la marca comercial.
Hay dos indicadores, por los dos anticuerpos que, principalmente, suele medir: los IgM y los IgG. Los primeros en aparecer son los IgM, entre los 7 y 10 días del contacto con la persona infectada, mientras los IgG aparecen entre los 10 y 15 días después.
Si la prueba da positivo en los anticuerpos IgM significa que se ha estado expuesto al virus recientemente, pero no especifica si la infección sigue estando en curso o si, por el contrario, ya se ha pasado. Hay que tener en cuenta también que durante los primeros días el virus es más complicado de detectar, por lo que se puede dar negativo y estar contagiado.
Por otro lado, un resultado positivo en anticuerpos IgG indica que la persona ha estado expuesta e indica una infección no necesariamente en curso, sino que ha podido ocurrir hace tiempo, incluso meses.
¿Dónde se han aprobado ya antes?
Cada vez son más los países que han autorizado la venta de test de coronavirus en sus farmacias. En Europa, por ejemplo, países como Alemania, Francia, Holanda, Austria, Bélgica, Italia y Portugal ya los venden a los ciudadanos sin necesidad de receta en farmacias, e incluso algunos en supermercados.
En España, el Gobierno se ha hecho de rogar a pesar de las múltiples peticiones del sector farmacéutico, intensificadas recientemente con el aumento de contagios entre la población joven.
Madrid fue, quizás, la Comunidad que consiguió lo más parecido a la norma. El Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso solicitó al Ministerio de Sanidad que autorizara a las farmacias realizar test de antígenos para aumentar la capacidad diagnóstica, y con la idea de incluir a las farmacias en la estrategia de detección precoz mediante test de antígenos en cribados poblacionales. Finalmente, el ministerio aprobó en febrero únicamente la segunda opción, es decir, test en zonas con alta transmisión donde se hagan cribados.
¿Cuánto cuestan?
Todavía no se ha hecho público el rango de precio que Sanidad establecerá para su venta en las farmacias.
En el resto de países que ya venden estas pruebas en sus establecimientos el precio varía. En Portugal, el importe por cada unidad (de test de antígenos) oscila entre los siete y los diez euros. En Francia es algo más bajo, y está regulado en los 5,20 euros.
En Bruselas, se autorizó la venta para la población en general con un precio de entre 7 y 8 euros, dependiendo de la prueba.
En Alemania, los test de autodiagnóstico pueden adquirirse incluso en supermercados y el precio ronda entre los cinco y los 10 euros. En el 'Aldi', por ejemplo, se vende un paquete de cinco pruebas a 25,99, y en el Lidl a 21,99.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios