Cada mes, 12 dueños de viviendas de protección oficial de Valladolid se lanzan a descalificar su casa para poder venderla más cara. Puede no parecer mucho, pero supone un elevado porcentaje de las viviendas que se venden al mes, «casi un 40%», según reconoció el agente de la propiedad inmobiliaria, José Manuel Hernández.

«Son unos datos llamativos», reconoció Hernández, quien ve como posible causa el hecho de que, al haber costado menos dinero, estas viviendas pueden ofrecer un precio más competitivo. «El dueño sigue ganando dinero aunque la venda más barata», afirma.

«Las VPO se han vendido siempre, incluso cuando se utilizaba la táctica de cobrar parte en negro, algo con lo que estamos totalmente en desacuerdo», reconoció.

Uno de los años con más descalificaciones fue el pasado, donde se contabilizaron 229. Este total son 18 más que las registradas en 2007 pese a que la crisis y el parón inmobiliario ya hacía estragos. Otra razón del incremento es que la gente pueda necesitar dinero y por eso se arriesgue.

Los trámites

Escrito. Hay que presentarlo en el edificio de Usos Múltiples. No hay una solicitud concreta, el dueño debe presentar un escrito elaborado por él en el que solicita la descalificación.

Sin ayudas. Una de las partes obligatorias para la liberalización es que se devuelvan todas las ayudas recibidas a la hora de la compra, incluso los intereses del préstamo cualificado.

Plazos. El trámite tarda, como mucho, tres meses desde que se solicita.

Requisitos. Para que la vivienda sea descalificada es necesario que haya pasado el plazo establecido en la convocatoria de cada promoción. En las que se otorgan ahora y en las de Villa de Prado no se puede solicitar.

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