El pellet es una especie de perdigón que se inserta en la cadera de forma ambulatoria y rápida y libera hormonas de forma continua durante todo el día. Normalmente, se inserta un solo 'pellet' de testosterona en mujeres que no han llegado aún a la menopausia, y en hombres mayores de 30 años, para nivelar su desbalance hormonal. A la mujer que ya entró en la etapa menopáusica se le inserta uno de estrógeno y uno más pequeño aún de testosterona.

En Clínica Galena explican que cada pellet se elabora de forma individualizada para cada paciente, que previamente se ha sometido a un análisis de sangre y a un chequeo específico para comprobar los niveles hormonales de cada uno. Después, el doctor encargado de insertar el pellet prescribe una fórmula magistral con los niveles de testosterona y estrógenos (en el caso de las mujeres) adecuados para cada hombre o mujer.

Este tratamiento con hormonas bio idénticas existe desde hace décadas en Estados Unidos, Australia y Europa. Estas hormonas se extraen de las plantas, son 100% naturales. El pellet restaura los efectos adversos que produce la edad y la bajada hormonal subsiguiente. El resultado en breve plazo es una mejor calidad de vida, de piel y de estado anímico. El pellet se revisa cada cuatro meses aproximadamente para sustituirlo por otro, en caso necesario.

El pellet se recomienda también especialmente en mujeres con menopausia para combatir los efectos más indeseados de la misma como son el aumento de peso, el cansancio, los sofocos; los estados de ansiedad, depresión, irritabilidad, así como los cambios en la piel, en la zona genital y en las relaciones sexuales.

Los hombres con andropausia también pueden regular sus niveles hormonales y desactivar los efectos que causa en el cuerpo este proceso de desaparición de la actividad de las glándulas sexuales masculinas.