Promocionar hábitos de vida saludables, reducir la contaminación y mejorar la imagen del litoral andaluz. Son los retos principales que persigue el programa Playas y Piscinas Sin Humo de la Consejería de Salud y Familias de la Junta, a los que este año, además, se suma un objetivo de especial trascendencia como consecuencia de la pandemia del coronavirus, que ha conllevado, incluso, la prohibición de fumar en los establecimientos de hostelería o en la vía pública si no se garantiza el metro y medio de distancia de seguridad con otras personas. Es por ello que ahora, más que nunca, cobran especial importancia los espacios sin humo, en los que se prohíbe fumar a pesar de encontrarse al aire libre.

Al impulso de este tipo de playas que fomenta Salud a través de la Red Andaluza de Servicios Sanitarios y Espacios Libres de Humo, se suma este año una importante novedad, que llega con fuerza y para quedarse: las piscinas municipales que también vetan el tabaco. Según los datos facilitados por la Consejería de Salud, la comunidad cuenta ya con medio centenar de piscinas públicas en las que está prohibido fumar, la mayor parte de ellas en la provincia de Jaén, con once espacios de estas características. Le siguen las provincias de Sevilla, con nueve; Cádiz y Huelva, con ocho cada una; Córdoba, con seis; Almería, y Granada, con otras tres cada una; y Málaga, con dos.

Mientras, la cifra de municipios que han adherido sus playas a este programa se ha duplicado respecto al pasado año. Así, frente a las 21 playas sin humo que se contabilizaban en las costas andaluzas el pasado año, el litoral cuenta este verano con un total de 42. Cádiz, con 22, sigue siendo la provincia con más arenales libres de humo, junto a Málaga, con diez. El resto se reparten entre Almería y Huelva, con cuatro cada una; una en Granada; y otra más en Córdoba, en este caso, una playa de interior. Entre las novedades de este año, destacan las playas de Sanlúcar de Barrameda, Caños de Meca o El Puerto de Santa María (Cádiz); la de Torrox (Málaga); las cuatro onubenses (hasta ahora, la provincia no contaba con ningún espacio libre de humo); o la cordobesa de interior en Almodóvar del Río (listado completo de playas sin humo al final de la noticia).

A este proyecto promovido por Salud pueden sumarse todos los ayuntamientos andaluces que lo deseen y que cuenten con playas o piscinas municipales. Para ello, solo deben cumplimentar su compromiso de adhesión, disponible en la página www.redpita.es, y enviarlo por correo electrónico a playasinhumo.csalud@juntadeandalucia.es. Una vez aceptada la solicitud, los consistorios se comprometen a implementar las políticas que consideren para mantener sus playas o piscinas libres de humo, como señalización, elaboración de un plan de comunicación y sesiones informativas sobre el tabaquismo.

"Desde la Consejería de Salud y Familias, trabajamos de forma intensa en las labores de intervención, control, concienciación y sensibilización ante el tabaco a través de acciones concretas reflejadas en el Plan Integral de Tabaquismo de Andalucía (PITA)", ha asegurado al respecto el titular del ramo, Jesús Aguirre.

Aunque aún queda trabajo por hacer, teniendo en cuenta que Andalucía tiene 786 municipios y más de medio millar de playas, el camino hacia la normalización de espacios al aire libre sin humos ha comenzado y ya es una realidad. Al igual que en otras comunidades autónomas del país, con Galicia a la cabeza, que este año cuelga el cartel de prohibido fumar en más de 160 playas. La Comunidad Valenciana lo hace en unos 50 arenales, Murcia en once y País Vasco en ocho, entre otras regiones.

Radiografía del tabaquismo

Según los datos de la última Encuesta de Salud de Andalucía, el 27,9% de la población andaluza mayor de 16 años, es decir, algo más de 1,9 millones de personas, consumen tabaco a diario, de los que un 31,4% son hombres y el 24,6% son mujeres. La edad media de inicio entre aquellos que fuman, tanto de manera habitual como esporádica, es de 19,5 años, una cifra que se ha incrementado en unos dos años y medio desde 2003.

De entre todos los fumadores andaluces, el 56% afirma que desearía dejar este hábito –que causa unas 10.000 muertes al año en Andalucía– y, no en vano, más del 43% asegura que lo ha intentado en alguna ocasión, porcentaje que se eleva por encima del 54% entre la población mayor de 75 años. En este sentido, la Consejería de Salud ofreció el pasado año intervención avanzada, tanto individual como grupal, a 65.850 fumadores; y ha ofrecido tratamiento farmacológico –disponible desde el 1 de enero de 2020 en el SAS en base a determinados criterios– a 44.619 personas.

Igualmente, desde la Administración se realizaron el año pasado 105.247 inspecciones para garantizar el cumplimiento de la normativa ante el tabaquismo en establecimientos, que se saldaron con un 98% de controles en los que se detectó el cumplimiento de la ley, con tan solo 114 proposiciones de sanción. Mientras, Salud recibió 433 denuncias por parte de ciudadanos por posibles incumplimientos de la ley, que dieron como resultado 290 expedientes iniciados y 102 resueltos con sanciones por una cuantía total de 148.340 euros. Entre enero y abril de este año, se han recibido 206 denuncias, de las que 59 han terminado en sanciones que suman cerca de 55.000 euros.

Listado de playas libres de humo