El empleo coge fuerza en España. En junio la Seguridad Social ganó 233.056 afiliados medios en junio, pero en todo caso todavía hay 447.800 personas que siguen en ERTE cuando ya ha pasado más de año y medio desde el inicio de la pandemia. Además, bajó en 166.911 desempleados en el mes pasado (una caída de un 4,4%), su mayor retroceso en cualquier mes desde que hay registros, según datos publicados este viernes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

En general, el número total de ocupados es ya de 19.500.277 cotizantes. Este repunte de afiliados supera el registrado en todos los meses de junio al menos desde 2001. Hasta ahora el impulso más importante era el de junio de 2005, cuando se ganaron 230.000 cotizantes.

La evolución de los datos de empleo es positiva. Y es que junio fue el segundo mes consecutivo en el que el paro registra récord de descensos. En mayo se había experimentado la mayor caída de la serie, de 129.378 personas, pero junio ha superado esta cifra, acercándose a una reducción de 167.000 personas.

Con el descenso del paro en junio, el volumen total de parados alcanzó al finalizar el sexto mes del año la cifra de 3.614.339 desempleados, que es la cifra más baja desde el inicio de la pandemia. Eso sí, esa cifra no incluye, de nuevo, a quienes se encuentran en ERTE. En el último año el desempleo acumula un descenso de 248.544 parados, lo que supone un 6,4% menos. Trabajo destaca además que en el desempleo se ha reducido en casi 395.000 personas en los últimos cuatro meses.

"No es un dato más, sino que nos da esperanzas y fuerza para seguir trabajando en la recuperación justa. Queda mucho por hacer", expresó la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en una rueda de prensa poco habitual en la que han sido los ministros -tanto ella como Escrivá- quienes analizaron los datos, algo que normalmente hacen los secretarios de Estado. Para Díaz, la caída del desempleo es "un logro colectivo que demuestra que los mecanismos de protección durante esta crisis, fruto del diálogo social, están funcionando". Escrivá, por su parte, considera que los datos "son extraordinarios". Y el ministro fue más allá: "Nunca en la historia de la democracia española nos hemos encontrado con una reducción de semejante intensidad".

El paro disminuyó en junio en todos los sectores, salvo en la agricultura, donde subió en 1.882 personas (un aumento 1%), por las características estacionales de esta actividad. El mayor retroceso del paro lo protagonizó el sector servicios, con 131.217 desempleados menos (una bajada 4,9%). Asimismo, en junio se registraron 1.798.047 contratos, un 55% más que en el mismo mes de 2020, de los que 172.866 fueron indefinidos, el 9,6% del total de contratos.

El paro bajó en junio en todas las comunidades autónomas. Los mayores descensos se dieron en Andalucía (con una caída de 58.281 desempleados), Cataluña (35.955 parados menos) y Baleares (una bajada de 12.602 parados). Por provincias, el paro bajó todas ellas menos en Huelva, donde aumentó en 4.251 desempleados, y en Vizcaya (371 parados más). Los mayores retrocesos los protagonizaron Barcelona (23.464), Málaga (19.248 parados menos) y Cádiz (una bajada de 14.981 desempleados).

Por otro lado, el paro registrado entre los extranjeros bajó en junio en 34.582 desempleados (un 6,2% menos) respecto al mes anterior, hasta situarse el total de inmigrantes en desempleo en 522.001, con un descenso de 3.727 parados en el último año (una bajada de un 0,7%).

El Ministerio ha informado además de que el gasto en prestaciones alcanzó los 2.332 millones de euros en mayo, de los que 555 millones correspondieron a prestaciones para trabajadores en ERTE, frente a los 632 millones del mes de marzo y los 3.426 millones de euros de mayo de 2020 (una bajada de un 84%). Entre abril y de 2020 y mayo de 2021, la factura de los ERTE en prestaciones asciende a 18.294 millones de euros.