Los hechos ocurrieron el 30 de diciembre de 2000, cuando, al parecer, el detenido destrozó la celda donde había sido recluido, momento en que los agentes, según la acusación, lo redujeron con porras y patadas causándole graves lesiones que acabaron con su vida.
Por su parte, la defensa niega tales agresiones y alega que los golpes que mataron a Mohamed Ibrahim fueron fortuitos y que se los produjo él solo tras chocar con una pared y caer al suelo.
No hay juicio de menores
Por otra parte, el juicio contra el menor acusado de matar de una navajazo a otro joven de nacionalidad ecuatoriana en La Fica se suspendió ayer por la no comparecencia de algunos testigos. La sesión se retomará el próximo día 26.
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