Los colegios asturianos están cada vez más libres de violencia contra los más débiles. El acoso escolar se redujo casi a la mitad durante el año pasado. En la región se registraron 22 denuncias en los centros educativos, un 42% menos de las que se formalizaron en 2007, según los datos de la Consejería de Educación.

Las aulas con más conflictos son las de Secundaria. Allí se concentran casi la mitad de los casos (10), seguido por Primaria y Bachillerato, con 7 y 4 denuncias, respectivamente. «Ha descendido por la mayor sensibilización de padres, alumnos y de los centros», señala Encarna García, presidenta de la Asociación Contra el Acoso Escolar (Acae). Eso sí, alertan de que ha surgido un nuevo problema: el ‘ciberacoso'. El acosador se vale del anonimato de Internet para hundir a la víctima.

La dinámica de acoso más común es esta: la sufren principalmente alumnos con alguna diferencia o enfermedad. Se burlan y ensañan con ellos sistemáticamente. «Son carne de cañón para los compañeros y a muchos les quedan secuelas psicológicas de por vida», dice Encarna. Según ella, se persigue mejor el acoso en los centros públicos que en los privados. «Hay muchos que se niegan a reconocer que tengan un problema».

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